El 28,1% de los encuestados por el CIS en su barómetro de octubre considera que la inmigración es el principal problema de los españoles en estos momentos. Sin embargo, cuando se les pregunta cómo esta inmigración les afecta personalmente, solo el 10,8% afirma que es el problema que más les atañe. Además, solo un 3% asegura que es el problema nacional que más les afecta.
Para un 23,8% de los encuestados, el principal problema de España es la crisis económica, mientras que un 22,7% señala que es la vivienda. El paro es considerado el mayor problema por un 22% de los encuestados, seguido de «los problemas políticos en general», con un 18,6%. La calidad del empleo preocupa al 13,9%, y el mal comportamiento de los políticos es motivo de inquietud para un 13,7% de los españoles, según el nuevo barómetro.
Otros problemas señalados como importantes incluyen la sanidad (12,2%), el Gobierno (11,7%), la situación de la juventud (8,1%), las desigualdades (6,2%), los problemas sociales (6,1%) y la educación (6%).
Independencia irrelevante
Por otro lado, el CIS revela cuáles son los problemas que menos preocupan actualmente a los españoles: la masificación turística (0,2%), el uso de las tecnologías por parte de los menores (0,2%), los problemas relacionados con la mujer (0,2%), la falta de servicios públicos (0,3%), las drogas (0,3%), los problemas psicológicos (0,3%), la España vaciada (0,3%), la emigración (0,4%), la guerra entre Rusia y Ucrania (0,4%), el sector primario (0,4%) y la situación de los autónomos (0,4%).
La independencia de Cataluña ha perdido la relevancia que tuvo en el pasado. Solo un 1% de los encuestados por el CIS considera que sigue siendo el principal problema que enfrenta España, y apenas un 0,5% asegura que este asunto les afecta directamente.