El alcalde de Castelldefels, el popular Manu Reyes, ha mostrado este jueves su rechazo al proyecto de ampliación del Aeropuerto Josep Tarradellas-El Prat, que el Govern de Salvador Illa pretende recuperar. Reyes, que siempre se ha mostrado muy crítico con esta ampliación, ha subrayado su «firme y rotundo desacuerdo» con el proyecto y con cualquier otro que signifique incrementar el número de operaciones en el aeródromo, con las consiguientes molestias para los residentes en esta zona.
El alcalde ha reclamado una solución «vinculada a los aeropuertos de Girona y Reus«. Y, además, ha lamentado que el Govern no se haya puesto aún en contacto con los municipios que podrían verse afectados por la ampliación tal y como está prevista. Por ello desde el Consistorio de Castelldefels se reclama a las administraciones que se busquen soluciones para los problemas de ruido y contaminación que ya sufren los vecinos por el aeropuerto. Además, el Ayuntamiento ha exigido que se busquen medidas para «equilibrar, reducir, minimizar y anular estos impactos«.
Participación del Consistorio
El Consistorio presidido por Reyes, por otro lado, no apoyará proyectos que supongan un incremento de las emisiones, atendiendo al Pacto Verde Europeo y a los compromisos que tienen como objetivo alcanzar la neutralidad climática en el año 2050, según recoge el medio Castelldefels Digital. Además, según el mismo medio, que cita al Ayuntamiento, «Castelldefels exige participar de forma activa e incorporarse a la mesa de trabajo del proyecto, así como en el conjunto de instancias y procesos de decisión respecto a la gestión del aeropuerto». En este sentido, hay que destacar que el municipio «tiene una amplia experiencia de vecindad y bagaje técnico sobre el Aeropuerto y cuenta con la OMSICA, una oficina municipal de seguimiento y control del aeropuerto». De hecho, el actual sistema de gestión de pistas segregadas, que ha demostrado ser la fórmula menos perjudicial, es fruto entre otros de la aportación e implicación de Castelldefels