Agentes de las unidades de Investigación de Mossos de Tarragona y Reus detuvieron a principios de este mes a tres hombres de 60, 58 y 47 años como presuntos autores de los delitos de robo con violencia, lesiones y estafa bancaria. Se trata de tres hermanos de los que el mediano participó en los dos robos, según ha informado la policía autonómica en un comunicado.
El primero de los hechos tuvo lugar el 3 de mayo en Reus. La víctima, un hombre que padecía una discapacidad física y psicológica severa, recibió una llamada telefónica por parte de dos individuos que le propusieron invitarle a comer. Para convencerlo aprovecharon los problemas de memoria de la víctima, diciéndole que se conocían desde hacía tiempo. El hombre accedió a la invitación y quedó con los dos hermanos en un bar de Reus. Una vez terminaron de comer, se desplazó con ellos en coche hasta Tarragona. Al llegar a un parque del centro de la ciudad, la víctima se dirigió con uno de los hombres un establecimiento para comprar unas bebidas. Al ir a pagar, el detenido «pudo ver el número de identificación personal que posteriormente utilizó para cometer el robo».
Después de «someter a la víctima a la ingesta masiva de bebidas alcohólicas y dejarlo en una situación vulnerable, los dos hermanos le agredieron con un objeto contundente, utilizando una violencia desproporcionada». Acto seguido, los detenidos le robaron la cartera y lo abandonaron malherido en el parque. Fue allí donde un ciudadano le prestó ayuda y llamó a una ambulancia, que lo trasladó al hospital. Mientras tanto, los dos hermanos sustrajeron de un cajero 1.200 euros con la tarjeta robada.
Anciano de 84 años
El segundo robo se produjo el 29 de julio en un domicilio de Reus. En este caso, intervinieron también dos de los hermanos, uno de ellos implicado en el anterior suceso. Con el mismo modus operandi, los dos hombres contactaron telefónicamente con la víctima, un hombre de 84 años. Con el pretexto de que conocían a un familiar suyo, fueron a visitarlo en su domicilio. Mediante el engaño, «le ofrecieron una bebida que contenía opiáceos con la clara intención de provocarle un estado de inconsciencia y robarle». Poco después, un familiar recibió varios mensajes del banco con el que trabajaba la víctima. Esto llamó la atención de esta persona, que se dirigió al domicilio del anciano y se lo encontró «en estado grave». La víctima fue trasladada en ambulancia al Hospital de Reus, donde quedó ingresada.
A raíz de estos hechos, la Unidad de Investigación de Tarragona y Reus inició una investigación conjunta que permitió detener a los tres hermanos, pertenecientes a «un clan familiar especializado en cometer robos con violencia a víctimas vulnerables». La investigación continua abierta y no se descartan nuevas detenciones. Los ya detenidos pasaron a disposición judicial el pasado 3 de agosto.