El presidente del Parlament, el posconvergente Josep Rull, ha aplazado por «problemas de agenda» hasta este martes el inicio de la ronda de contactos previa a la celebración del debate de investidura del que el socialista Salvador Illa debería salir ya como nuevo presidente de la Generalitat. Este debate, si todo va según lo previsto, debería celebrarse el próximo jueves. Sin embargo, muchos temen que la sesión no acabe bien para el líder del PSC pues, si Carles Puigdemont, regresa ese día a Cataluña, es muy probable que sea detenido por orden del Tribunal Supremo. Una detención que Rull podría utilizar como argumento para suspender la sesión sine die.
Esta posibilidad es ahora mismo la que muchos barajan en Cataluña. Es el caso de SCC, que culpa directamente al PSC y a Salvador Illa de lo que pueda suceder. «Lo realmente grave es que, existiendo una alternativa al nacionalismo», ha publicado en X la entidad constitucionalista, «el partido ganador de las elecciones permitiera a un secesionista encarcelado por sedición, dispuesto a todo por Puigdemont, presidir el Parlament de Cataluña».
Lo realmente grave es que, existiendo una alternativa al nacionalismo, el partido ganador de las elecciones permitiera a un secesionista encarcelado por sedición, dispuesto a todo por Puigdemont, presidir el Parlament de Cataluña. Ahora, en el pecado va la penitencia. https://t.co/qGxPeUkHGL— Societat Civil Catalana (@Societatcc) August 5, 2024
Boye confirma el regreso pero no adelanta su estrategia
El abogado de Puigdemont, Gonzalo Boye, confirmó este domingo en RNE que el líder de Junts tiene previsto llegar a Barcelona y participar en el debate de investidura para mostrar su rechazo a Illa y explicar a ERC por qué no debe pactar con el PSC. Boye no quiso avanzar qué hará en el caso de que Puigdemont sea detenido. Pero es evidente que es precisamente esa detención la que interesa a Junts para forzar a ERC a no seguir adelante en su acuerdo con los socialistas. Más tarde o más temprano, Puigdemont podrá disfrutar de los beneficios de la Ley de Amnistía y, mientras tanto, es de prever que el separatismo más ultra, representado por la ANC y los CDR, hayan movilizado la calle en contra de los republicanos.
Missatge que estan fent correr els procesistes per WhatsApp sobre el retorn de Puigdemont 👇 pic.twitter.com/5rnYsFVy9j— Arqueòleg 🏺🌈🔻🇵🇸 (@arqueoleg) August 4, 2024
El disputado voto de Mar Besses
ERC se encuentra ahora mismo en una situación muy delicada. Su militancia ha aprobado por la mínima el acuerdo con el PSC. Pero, en el seno del partido, el enfado es patente desde la debacle de las elecciones de mayo. Oriol Junqueras y Marta Rovira han dado un paso atrás y la formación se encuentra a la espera de celebrar un congreso del que salga la nueva dirección. A la vez, el escándalo de la persecución contra los Maragall por encargo de la propia formación está teniendo importantes consecuencias internas. Y el argumento de la necesidad de ampliar la base por la vía del autonomismo para llegar a la independencia convence ya a pocos.
Si Puigdemont es detenido, ERC lo tendrá difícil para seguir justificando su acuerdo con el que llaman el candidato del 155. Y, sobre todo, para seguir rechazando la oferta de unidad que el prófugo lleva promoviendo desde 2020. Los republicanos, pues, se encontrarán entre la espada y la pared este jueves y con las calles, muy probablemente, otra vez incendiadas. Paralelamente, y en sus propias filas, ERC tiene ahora mismo la incógnita de lo que decidan los jóvenes del partido y, sobre todo, la diputada autonómica que los representa, Mar Besses, de cuyo voto depende la investidura de Illa. Jovent Republicà ya ha dicho que no acepta que el socialista sea el nuevo presidente del Govern y, de momento, no ha cambiado de postura. Salvador Illa, pues, sigue teniendo más dudas que certezas sobre su futuro político.
«No se dejará detener»
El reto para ERC es una evidencia. Y así lo ha demostrado la presidenta de Junts, Laura Borràs, este lunes en una entrevista en Catalunya Ràdio. Borràs ha asegurado que la posible detención de Puigdemont «reventaría la democracia española porque confirmaría que el poder judicial actúa al margen del legislativo». Y se ha preguntado que hará Illa si Puigdemont es detenido porque los «jueces españoles» no aplican una ley, la de Amnistía, aprobada por su partido. «El presidente no se dejará detener», ha añadido.
«La detenció de Puigdemont rebentaria la democràcia espanyola perquè confirmaria que el poder judicial actua al marge del legislatiu.» @LauraBorras, presidenta de Junts, al #MatíCatRàdio https://t.co/H0Mr11r6y1 pic.twitter.com/T85BUlct8x— Catalunya Ràdio (@CatalunyaRadio) August 5, 2024
