Junts no quiere que Cataluña entre en el reparto entre comunidades que tiene previsto hacer el ministro de Política Territorial, Ángel Torres, de los menores no acompañados que lleguen a Canarias. Así se lo ha trasladado el partido a Torres mientras que, paralelamente, la formación negocia con el Gobierno de Sánchez el traspaso a Cataluña de las competencias en materia de inmigración. Una postura que se explica teniendo en cuenta el discurso antiinmigración de la ultra Silvia Orriols y que resta votos a la posconvergencia.
Cataluña recibió el pasado mes de octubre 2.000 de los 7.000 inmigrantes menores y adultos que tras llegar a Canarias fueron redistribuidos por el Gobierno en todo el país. Junts no quiere que esto vuelva a suceder y así se lo ha trasladado al ministro, que ahora intenta convencer a 14 de las 17 comunidades autónomas de que se hagan cargo de la situación. Torres promete, a cambio, financiación «suficiente» para este objetivo. Junts, por su parte, ya ha advertido al Gobierno de que no votará a favor de este plan de reparto de inmigrantes, por lo que el Ejecutivo de Sánchez tendrá que buscar el respaldo del PP.
Una cuestión urgente
El ministro considera que ahora mismo es necesario que Junts deje a un lado la cuestión del traspaso de competencias porque solventar la situación de estos menores no acompañados es «urgente«. Sobre todo porque Canarias ya no puede asumir el cada vez más elevado volumen de llegadas a sus costas.
Mientras tanto, la nueva diputada de Aliança Catalana y alcaldesa de Ripoll, Silvia Orriols, ya ha dejado claro que los dos representantes de esta formación no apoyaran a ningún candidato a la presidencia del Govern que no se comprometa a sacar adelante «una ley de extranjería potente».