Las provincias de Madrid, Barcelona y Sevilla, con siete, cinco y cuatro casos respectivamente, son las provincias españolas en los que más asesinatos machistas se produjeron a lo largo de 2022. Así lo recoge Informe sobre víctimas mortales de la violencia de género y doméstica en el ámbito de la pareja o expareja durante 2022, elaborado por el Observatorio contra la Violencia Doméstica y de Género del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) y presentado este martes. El mismo informe señala que la violencia de género se cobró en aquel año un total de 40 víctimas mortales, un asesinato cada 7,5 días.
20 de las 49 víctimas (el 40,8 %), según el mismo informe, habían presentado denuncia previa; de esas 20, 14 mantenían la convivencia con sus agresores en el momento de los hechos. Dos menores de edad, un niño y una niña, engrosan la lista de víctimas mortales de la violencia machista en 2022. Otros 37 quedaron huérfanos a lo largo del año. Durante el mismo periodo, además, se registraron tres casos de violencia doméstica íntima en los que dos hombres y una mujer fueron asesinados por sus parejas o exparejas, todas ellas mujeres. Ninguna de las tres parejas tenía hijos y sólo una de las víctimas había denunciado previamente a su agresora. «La violencia doméstica íntima es aquella que se produce en el ámbito de la pareja o expareja, excluyendo los casos en los que el agresor es un hombre y la víctima una mujer», ha recordado el CGPJ en una nota de prensa, «incluye, por tanto, agresiones de mujeres a sus parejas o exparejas varones y agresiones ocurridas en el seno de parejas o exparejas homosexuales».
El domicilio, principal escenario del crimen
La media de edad de las mujeres asesinadas en 2022 fue de 44,6 años, una cifra muy similar a la del año anterior (44,3). La más joven tenía 17 años y la de más edad, 88. Como en años anteriores, casi la mitad de las mujeres asesinadas (42,8 %) tenía entre 26 y 45 años, pese a que esa franja de edad representa menos de un tercio de la población de mujeres mayores de 25 años.
El domicilio, común o de uno de los miembros o exmiembros de la pareja, volvió a ser el principal escenario de los crímenes machistas. El 76,6 % de los casos tuvieron lugar en el interior de un domicilio, un porcentaje muy similar al de la serie histórica, que se sitúa en el 75,6 por ciento. A mucha distancia, el segundo escenario con mayor número de casos fue el lugar de trabajo (7 %) seguido por las zonas exteriores del domicilio, la vía pública y los parajes o espacios abiertos (4 % en cada uno de ellos), el vehículo (2 %) y otros emplazamientos (2%). El método utilizado con más frecuencia para cometer el crimen fue el arma blanca (65,2 %), seguido por la asfixia o estrangulamiento (15 %), el arma de fuego (8,7 %) y los golpes, con o sin objetos (6,5 %), entre otros. El 61 por ciento de los crímenes cometidos con arma de fuego terminó con el suicidio del agresor, circunstancia que se reduce hasta el 16 % de los casos cuando el crimen se comete utilizando otros medios. Puede consultar el resto de los datos del informe en este enlace.