Este jueves 14 el Boletín Oficial de la Asamblea de Madrid publica dos leyes importantes en materia fiscal. En la primera se deflacta un 3,1% la escala autonómica y los mínimos personal y familiar del IRPF. En la segunda se modifica el Impuesto sobre el Patrimonio tras la declaración como constitucional del Impuesto a las Grandes Fortunas. Todo ello aplicable ya en este ejercicio 2023, a declarar en 2024. Veamos.
Deflactar el IRPF es cuestión de justicia
En un entorno inflacionario es de justicia corregir (deflactar) la escala del IRPF. Y el importe de las deducciones. De no hacerse así, estamos soportando de tapadillo un incremento del gravamen. Hasta 2021 la inflación española era bajísima. Pero en 2021 fue de un 6,5%. En 2022 un 5,7%. Y en 2023 será un 3,2%. De esta manera, ganar 30.000 euros es 2020 es lo mismo que ganar 34.852 euros en 2023. Y, si no se deflacta la tarifa (como pasa en la escala estatal y en la catalana), el tipo medio de la cuota a pagar en 2023 por esa renta sube hasta un 25,59%, frente al 24,76% que salía en 2020. Eso supone para este contribuyente un clavo de 289 euros. Y el clavo es todavía mayor por no deflactar las deducciones.
Cómo lo ha hecho Madrid
La Comunidad de Madrid ha sido la más sensible a este tema. Y corrige los efectos de la inflación más que nadie. Además, tiene los tipos de gravamen de IRPF más bajos de España: entre 8,50% y 20,50%. En Cataluña la horquilla va del 10,50% al 25,50%. Sin comentarios.
En el IRPF de 2022 Madrid deflactó la escala autonómica un 4,1% y aumentó el mínimo personal de 5.550 euros a 5.778 euros. También los mínimos familiares.
En el IRPF de 2023 Madrid deflacta la escala un 3,1% y aumenta el mínimo personal de 5.778 euros a 5.957 euros. También los mínimos familiares.
Todo esto se nota mucho. Veamos un ejemplo.
A un contribuyente madrileño, soltero, con una renta de 35.000 euros, le sale en el IRPF 2023 (a declarar antes de junio 2024) una cuota autonómica de 3.787 euros, Y una cuota estatal de 4.333 euros. Buena diferencia entre Madrid y el Estado, debida en buena parte a no deflactar la escala estatal.
¿Y cómo le sale a un contribuyente catalán? La escala catalana es muy fuerte y sigue sin deflactar. Le sale una cuota autonómica de 4.575 euros. La cuota estatal es la misma que en Madrid.
El resultado es que en Cataluña paga 788 euros más que en Madrid. Es un buen cacharrazo. Para que el Govern se lo gaste en TV3, en sus embajadas y en los sustanciosos sueldos de sus altos cargos.
EL Govern propone rebajar un punto en el primer tramo
El Govern propone ahora una rebaja de un punto en el primer tramo de la escala autonómica del IRPF: de un 10,50% a un 9,50% para los primeros 12.450 euros. Pero eso sólo beneficiará a las rentas inferiores a 33.000 euros. A las que superen ese importe se les subirá el tipo, de modo que no les beneficie en nada la rebaja del primer tramo. Es una rebaja irrisoria. Y aplicable para el IRPF 2024 a declarar en 2025.
¿Y qué pasa con el impuesto sobre el patrimonio en Madrid?
Tras la reciente Sentencia del Tribunal Constitucional, confirmatoria de la constitucionalidad del Impuesto sobre las Grandes Fortunas (IGF), queda claro que los contribuyentes madrileños con un patrimonio superior a 3.700.000 euros están obligados a pagar IGF al Estado. Y no pueden deducirse nada por Patrimonio pues en Madrid hay una bonificación del 100%.
Por eso, en junio de 2023, 10.302 contribuyentes madrileños han declarado IGF ejercicio 2022, ingresando en el Estado 555 millones.
Como era previsible, la Comunidad de Madrid ha reaccionado y ha optado por eliminar en Patrimonio la bonificación del 100%, sustituyéndola por otra bonificación igual a la diferencia entre la cuota íntegra de Patrimonio y la cuota íntegra del IGF. De esta manera:
a)Los contribuyentes que superen los 3.700.000 euros tendrán que declarar Patrimonio y pagarán exactamente lo mismo que pagarían por IGF. Y ese dinero no va al Estado sino a la Comunidad Autónoma. También tendrán que declarar IGF, pero les saldrá cero a pagar pues pueden deducirse lo pagado por Patrimonio, que es una cantidad idéntica.
b)Los contribuyentes con patrimonio inferior a 3.700.000 euros no tienen que pagar nada ni en Patrimonio ni en IGF. Y no están obligados a declarar, salvo que su patrimonio supere los 2.000.000 euros.
Esto se aplica ya en este ejercicio 2023, a declarar en 2024.
Y qué harán las demás autonomías que tienen bonificado patrimonio
En Andalucía, se está tramitando una modificación del Impuesto de Patrimonio, según la cual los contribuyentes con patrimonio superior a 3.700.000 euros podrán optar entre pagar a la Comunidad por Patrimonio o pagar al Estado por IGF. La misma cantidad en ambos casos. Es una opción extraña. Los contribuyentes por debajo de 3.700.000 euros no pagarán nada.
En Murcia se mantiene en 3.700.000 euros el mínimo exento por Patrimonio. Por encima de esa cantidad se paga Patrimonio a la Comunidad Autónoma y nada por IGF.
En Galicia, que tiene bonificado Patrimonio al 50%, se hará algo parecido a lo de Madrid, para que todo lo que resulte a pagar por IGF se ingrese por Patrimonio a la Comunidad Autónoma.
Patrimonio se mantiene en todas las demás autonomías
En todas las demás Autonomías se seguirá pagando Patrimonio si se supera el mínimo exento de 700.000 euros (500.000 en Cataluña, para marcar la diferencia). Normalmente, no resultará nada a pagar por IGF.
En este tema, al igual que en IRPF, Cataluña se mantiene pertinaz en su infierno fiscal.
Por otra parte, es increíble que se mantenga Patrimonio en las autonomías gobernadas por el PP. Si no tienen claro que este impuesto es una antigualla irracional e injusta, mal vamos.