Nuevo episodio de intransigencia lingüística por parte del nacionalismo. Junts per Catalunya ha exigido medidas contra Amazon después de que la compañía norteamericana rechazase una denuncia policial por no estar redactada en español —lo estaba exclusivamente en catalán—. El caso ha salido a la luz gracias al lobby ultra Plataforma per la Llengua, conocido por espiar la lengua de los niños en el patio y organizar escraches contra los comercios que usan el castellano. La entidad mostró un texto en el que Amazon se negaba a aceptar un denuncia de los Mossos d’escuadra redactada en catalán.
El texto recibido por el cliente, que interpuso una denuncia porque había pedido un ordenador y en la caja solo había una botella de agua, rezaba así: «Necesitamos que la denuncia esté en español, no en catalán. Por lo tanto, no podemos continuar ayudándole en este asunto. Le pedimos que resuelva los problemas y vuelva a compartir con nosotros la denuncia policial». Tras lo sucedido, la formación neoconvergente registró una pregunta por escrito el pasado 27 de noviembre explorando la posibilidad de una «actuación legal» contra la compañía «ante la vulneración de los derechos lingüísticos de los catalanoparlantes».