Las políticas lingüísticas nacionalistas marginan de nuevo al castellano. Como es sabido, el sistema de inmersión lingüística veta al español —lengua materna mayoritaria de los catalanes y oficial en todo el país— como lengua vehicular, reservando este papel exclusivamente al catalán, considerada única «lengua propia». Esta política monolingüe en catalán se extiende también al idioma que debe emplearse en las comunicaciones del centro escolar, así como en su rotulación. Sin embargo, llama la atención que, en el caso de incluirse más lenguas en este apartado, se siga orillando al castellano.
Esto es lo que ha ocurrido en un colegio de Mataró, según ha desvelado la asociación constitucionalista Asamblea por una Escuela Bilingüe (AEB). Se trata del centro La Divina Providencia, que rotula sus instalaciones exclusivamente en «catalán, inglés y alemán». «La escuela Providencia no utiliza el castellano, lengua materna de la mayoría de sus alumnos, porque en Cataluña el plurilingüismo excluye siempre al español, casualmente», ironiza la entidad presidida por Ana Losada.