Ya se conoce cuál ha sido la contraprestación obtenida por Colau a cambio de respaldar la investidura de Collboni. Según ha desvelado el alcalde de Barcelona, la «estructura gerencial y la estructura directiva» del Ayuntamiento de la Ciudad Condal se mantendrán intactas —esto es, tal y como estaban cuando los comunes gobernaban con el PSC—. Collboni ha defendido mantener dicha estructura, conocida como el sottogoverno, porque su obligación es «garantizar la continuidad institucional».
Por otra parte, Collboni ha manifestado en declaraciones a El Periódico su voluntad de intentar forjar una «coalición progresista» en los próximos meses. «Hice una oferta el jueves pasado a los comunes, cuando les pedí su apoyo, para formar un gobierno de coalición con ellos, y esa es la idea que tengo en la cabeza. Son los comunes los que han decidido ir a la oposición e investirme. Mi propuesta es una coalición progresista. (…) Ya veremos en los próximos meses cómo articulamos las mayorías necesarias para hacer gobernable el consistorio», ha sostenido Collboni.