Una de las señas de identidad del constitucionalismo en Cataluña es la defensa del bilingüismo en la educación, que actualmente excluye al castellano consagrando al catalán como única lengua vehicular de ésta. En este sentido, el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, volvió a defender ayer en una entrevista en Onda Cero su compromiso con la «cordialidad lingüística». En Cataluña, opinó que esa cordialidad no se produce porque el catalán es la «lengua dominante», lo que no resulta «equilibrado». Su propuesta pasa por respetar ese equilibrio para que la «cordialidad lingüística» que impera en la calle sea también una realidad en las aulas.
Por otra parte, El Mundo ha publicado hoy que Feijóo tiene previsto una reforma legal para garantizar dicha «cordialidad lingüística» si llega al gobierno, tal y como pronostican la mayoría de encuestas. Así, la ley contempla reforzar la Alta Inspección Educativa para garantizar que el castellano sea idioma vehicular en las aulas. Esto no consistiría sólo en dotar de más inspectores al sistema, sino también permitiendo a los inspectores que puedan imponer a los directores del centro que incumpla «sanciones administrativas elevadas».