La ultra Plataforma per la LLengua, autodenominada la ONG del catalán pero conocida también como los espias del patio por haber vigilado sin consentimiento a los niños durante el recreo para saber qué lengua hablaban, carga ahora contra Veritas. Después de haber arremetido contra restaurantes como La Tagliatella o Vicio por tener la carta en castellano, acusan a esta establecimiento de alimentos saludables en Puigcerdà (Gerona) por haber «prescindido de una trabajadora por motivos lingüísticos».
Tras ser despedida el 31 de marzo, la empleado grabó una conversación con un encargado en la que éste le informaba de que habían recibido quejas por haber respondido en catalán a clientes que se dirigían a ella en castellano. La plataforma ha presentado una demanda para que se readmita a la trabajadora, denunciado que el acto supone una discriminación al «uso del derecho protegido de hablar en catalán» de la empleada. Paradojícamente, la entidad ha promovido campañas contra empleados de comercios por usar el castellano. Veritas, por su parte, ha calificado como «inaceptable» la actuación del supuesto encargado y ha anunciado una investigación.