La asociación separatista Òmnium Cultural es una entidad conocida por sus presupuestos radicales en el terreno político. Además de haber sido una de las principales promotoras del golpe contra la constitución en 2017, en los últimos tiempos se ha significado por tachar de «inadaptados» a los catalanes castellanohablantes en una guía editada por el colectivo o pedir prisión para un agente de policía que participó en el referendo ilegal del 1-O.
Ello no ha impedido, sin embargo, que Cruz Roja haya prestado su apoyo a una campaña del organismo que pretende promover «el sentimiento de pertenencia» a Cataluña bajo el nombre de (Re)voltes. Constará de diversas actividades en las que, fusionando «pasado, presente y futuro», Òmnium desea «fortalecer a Cataluña como pueblo» promoviendo las luchas sociales. Asimismo, se incidirá en la necesidad del monolingüismo, mostrando a la lengua catalana como idioma de «cohesión». La iniciativa cuenta con el respaldo del Govern y el Ayuntamiento de Barcelona, así como de un centenar de entidades.