La Fiscalía de Barcelona ha presentado este viernes ante el juzgado de Instrucción número 1 su denuncia contra el Barça por el escándalo de los pagos al ex árbitro José María Enríquez Negreira. El Ministerio público acusa directamente al club de un presunto delito continuado de corrupción en los negocios, en su modalidad de fraude deportivo. También acusa al FC Barcelona de administración desleal y de falsedad en documento mercantil, según ha avanzado El Mundo.
No quedan ahí las acusaciones. La Fiscalía denuncia también las actuaciones de los presidentes del club Sandro Rosell y Josep Maria Bartomeu, así como las de los directivos Óscar Grau y Albert Soler. En su escrito, apunta que «a través de los presidentes Sandro Rosell y Josep Maria Bartomeu, el Barça alcanzó y mantuvo un acuerdo verbal estrictamente confidencial» con Negreira. Este acuerdo habría facilitado que el ex árbitro, en su condición de número 2 del CTA, «a cambio de dinero, realizase actuaciones tendentes a favorecer al Barcelona en la toma de decisiones de los árbitros en los partidos que disputase el club y así en los resultados de las competeciones».
Según recoge El Mundo, la Fiscalía cifra en 7,8 millones de euros el dinero pagado por el Barça a Negreira entre 2001 y 2018. «Supuso una auténtica remuneración no prevista en los estatutos del club ni aprobada por la Asamblea General. En definitiva, dichas percepciones no tuvieron soporte legal ni estatutario alguno». El escrito deja también constancia de que las cuentas bancarias donde Negreira recibía los pagos del Barça solo tenían estos ingresos. Y que este dinero era posteriormente retirado por terceras personas mediante cheques al portador firmados por el ex árbitro.