La entidad constitucionalista Impulso Ciudadano ha anunciado este viernes que pedirá el amparo del Defensor del Pueblo para Begoña Suárez, la enfermera del Hospital Vall d’Hebron que está siendo objeto de un grave linchamiento por parte del separatismo tras criticar la necesidad de contar con el nivel C1 de catalán para poder opositar en esta comunidad autónoma. El mismo conseller de Salud, Manel Balcells, se ha sumado al acoso al anunciar que ha ordenado la apertura de un expediente contra esta enfermera andaluza que trabaja en el área de Pediatría y que, según El Mundo, estaría tramitando la baja por estrés ante la situación de persecución por parte de los independentistas.
Impulso Ciudadano ha dado a conocer su decisión en un mensaje publicado en su cuenta de Twitter. En el mismo ha señalado que denunciará «el acoso institucional por motivos lingüísticos» del que está siendo víctima la joven. Un acoso que, ha recordado, «coarta la libertad de expresión y genera una espiral de silencio incompatible con una democracia sana».
La Asamblea para una Escuela Bilingüe (AEB) también ha denunciado el linchamiento de esta profesional sanitaria. En un mensaje en la misma red social, la AEB ha calificado de «intolerable» el señalamiento de la joven «por dar su opinión sobre los requisitos lingüísticos». «Vivimos en democracia», ha recordado la AEB, «no en una dictadura lingüística«.
Societat Civil Catalana (SCC), por su parte, ha denunciado que los ciudadanos viven en Cataluña «bajo un régimen nacionalista intimidatorio que azuza el linchamiento público de una joven enfermera». Y ha recordado que quienes más critican sus palabras son los mismos que «alientan boicots, persiguen el español en los colegios, imponen multas lingüísticas y vetan la lengua común en una TV pagada por todos».