La Conselleria de Derechos Sociales y la Federación Internacional de Comunidades Educativas (FICE) han puesto en marcha un programa piloto de acogida especializada de especial preparación con el objetivo de encontrar familias de acogida que puedan hacerse cargo de menores tutelados con problemas de salud mental o de conducta. En concreto, el Govern busca a 16 familias que acojan a 16 niños de entre siete y 18 años que actualmente residen en centro de la Dirección General de Atención a la Infancia y a la Adolescencia (DGAIA).
Los beneficiarios de este programa son menores que «no pueden vivir con sus familias de origen y no pueden beneficiarse de algunas de las modalidades de acogida familiar vigentes por el reto que suponen sus dificultades de conducta y adaptación«, según ha explicado el Govern en un comunicado. También ha señalado que, aunque estos menores reciben en los centros la atención que necesitan, «resulta complejo trabajar cuestiones emocionales que están en la base de sus dificultades». Para estos niños, «la única posibilidad de disfrutar de un entorno familiar se desarrolla a través de un nuevo servicio específico adaptado a sus necesidades». De este modo, a los beneficios de la acogida tradicional se suman los de «la reparación del daño emocional que han sufrido estos niños y adolescentes».
Las familias elegidas para este programa contarán con el apoyo de un equipo técnico con el que deberán preparar un plan de intervención. Estas familias, además, deberán tener entre sus miembros con algunos que dispongan de «una cualificación profesional que le permita desarrollar la labor reparadora con el niño en el día a día de la vida en familia». Así, deben presentar formación en psicología, educación social, magisterio, trabajo social, pedagogía o psicopedagogía, entre otras titulaciones. Además, deberán demostrar dos años mínimo de experiencia en el ámbito de la infancia y completar «un proceso de valoración psicosocial que estime si están preparados para llevar a cabo esta labor».