La pretensión de la presidenta de la ANC, Dolors Feliu, de activar una «lista cívica» de cara a las próximas elecciones autonómicas y que se enfrente al separatismo oficial está a punto de provocar una ruptura en el seno de la entidad. Según recogen varios medios separatistas, algunos miembros del secretariado nacional de la ANC barajan la posibilidad de presentar su dimisión en la reunión que la entidad mantendrá el próximo sábado. Renuncias que se formalizarían con la intención de forzar una asamblea extraordinaria que permitiera sacar a Feliu de la dirección de la asociación separatista.
Los críticos con Feliu no se oponen a la candidatura electoral de la ANC. Sin embargo, consideran que antes de llegar a ese punto es preciso redefinir el papel de la entidad en esta nueva etapa del procés. Algo que, al parecer, Feliu no acepta, puesto que tiene claro que es necesario concurrir a un proceso electoral para forzar a ERC, Junts y la CUP a activar el proceso independentista de una vez por todas.
En las últimas semanas, se han ido escuchando diferentes voces contra la gestión de Feliu. E, incluso, se ha dado a conocer un grupo de críticos bajo el nombre de colectivo Endesinenter, que defiende la necesidad de remodelar el comité permanente de la entidad para poder reconducir la situación. Sea como sea, lo cierto es que Feliu está ahora mismo en la cuerda floja y no se puede obviar que tampoco cuenta con el respaldo de los asociados, que votaron a favor de Jordi Pesarrodona como secretario general. Fueron los secretarios nacionales los que, como es habitual en la ANC, dieron la espalda a los asociados para escoger a Feliu.