Esquerra Republicana da un paso más en el doble discurso que mantiene con respecta la cumbre hispanofrancesa de pasado mañana en Barcelona en la que participarán tanto el presidente del Gobierno Pedro Sánchez como el presidente de la República francesa Emmanuel Macron. Y es que, mientras Pere Aragonès ha aceptado la invitación de Sánchez y asistirá a la Cumbre, su partido, ERC, se manifestará con otros grupos de separatistas radicales en contra del evento por el carácter «represor» de ambos países con la realidad nacional catalana. De esta manera, no solo no ve incoherencia alguna en su actitud, sino que está animando a sus seguidores secesionistas a que acudan a la convocatoria contra el encuentro.
Así lo ha hizo ayer la secretaria general adjunta y portavoz de ERC, Marta Vilalta, quien llamó en rueda de prensa a participar en la movilización contra el acto que tendrá lugar en el Museo Nacional de Arte de Cataluña (MNAC). El motivo reside en «una gran evidencia: que el conflicto político entre Cataluña y el Estado español no se ha resuelto», explicó Vilalta. En este sentido, considera que ERC debe estar presente para defender la «autodeterminación» de Cataluña y la «amnistía» de los autores del golpe contra el orden constitucional en 2017. Todo ello, sin embargo, no es óbice para que estén «convencidos y orgullosos de que presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, esté donde tiene que estar».