Rosalía se consolida como fenómeno mundial. La cantante de Sant Esteve Sesrovires obtuvo ayer el premio al mejor disco en los Grammy Latino con su última obra, la arriesgada Motomami —en 2019, la anterior, El mal querer, también fue acreedora del galardón—. Emocionada y con lágrimas en los ojos, la catalana subió al escenario para revelar lo duro que fue el proceso de creación del álbum. «Motomami es el disco que más me he tenido que pelear para hacerlo, que mas me ha costado hacer, pero que tiré para adelante y que más alegrías me ha dado», relató.
Durante su actuación, por otra parte, la televisión americana censuró las palabras de contenido sexual con pitidos: dos «fuck» y un «chingarte». Posteriormente, en la zona de prensa, la cantante explicó: «Si una canción con una letra así todavía crea conversación, si que una mujer hable de eso se convierte en algo que la gente comenta, para mí eso demuestra que se tienen que seguir haciendo más canciones así». Rosalía también quiso agradecer en su discurso a Latinoamérica «por tanta inspiración», así como a su familia y al «amor de su vida» (Rauw Alejandro, en primera fila).
