Posconvergentes y republicanos no pierden la ocasión de tirarse los trastos a la cabeza a pesar de que tienen en sus manos el gobierno de la Generalitat. Pero, en estos momentos, la posibilidad de que ERC retome el diálogo con el Gobierno del socialista Pedro Sánchez ha inquietado a Junts. El primero reaccionar fue el fugado Carles Puigdemont, que pidió unidad al separatismo frente al Estado. Luego lo hizo Jordi Puigneró, vicepresidente del Govern, quien exigió a los republicanos «menos reuniones y más hacer perder votaciones a Sánchez». Y la tercera en discordia ha sido la secretaria general de ERC, Marta Rovira, fugada de la Justicia española y residente en Ginebra.
Rovira no ha dudado a la hora de responder a Puigneró, que reaccionó así al anuncio de un nuevo encuentro entre Pere Aragonés y Pedro Sánchez en las próximas semanas y tras la reunión mantenida por la consellera Laura Vilagrà con el ministro de Presidencia, Félix Bolaños. La respuesta de Rovira ha llegado vía Twitter y sorprende porque da una idea de la realidad del supuesto rechazo del separatismo al Gobierno central.
«Menos declaraciones y más datos», ha respondido Rovira a Puigneró, «llevamos el recuento de las votaciones en Madrid. Junts ha votado el 60% de las iniciativas a favor del Gobierno. Esquerra, el 70%». Y tras demostrar involuntariamente que unos y otros son buenos apoyos para el PSOE en el Congreso, ha añadido: «Las que hay de diferencia, diría que Junts no las ha votado porque le han parecido demasiado progresistas».