Uno de los medios separatistas con más subvenciones y publicidad de la Generalitat, El Nacional, cuenta entre sus filas con colaboradores cuya única función es arremeter contra todo lo que huela a España. Y, así, llevan semanas intensas gracias al auto del TSJC que obliga a la Generalitat a ejecutar forzosamente la sentencia de enero de este año sobre el 25% de castellano. Entre este batallón de escribidores destaca por su agresividad Jordi Galves, quien muestra habitualmente una especial animadversión por los españoles.
Algo que también ha hecho este sábado con un artículo y un tuit en los que afirma sin rubor que los separatistas están ahora obligados a «saber una lengua que no sirve para nada fuera de España». «Es como aprender árabe o hindi», asegura, «no sirve de nada internacionalmente».
En un delirante artículo, Galves asegura que «como lengua internacional, el español no llega a los 100 millones de hablantes». Y prosigue: «Los más de 20 países que hablan español en el planeta son mayoritariamente muy pobres y sin apenas influencia internacional«. El columnista, como era de esperar, se refiere al catalán como «el petróleo» y «las minas de oro» de Cataluña además de «la fórmula mágica» que explicaría «por qué en un territorio tan insignificante del Mediterráneo» los catalanes pudieron «tirar adelante».
El delirio de Galves alcanza su punto máximo cuando escribe que «ni Hitler, ni Mussolini, ni Stalin, ni Franco hablaban catalán». Por lo que, apunta, los catalanes pueden decir «con una sonrisa en la boca» que «la lengua catalana no es una curiosidad histórica ni una incertidumbre». «La razón es bien clara», asegura, «la lengua catalana es cobijo del ser y del saber. La lengua catalana es civilización«.