Los últimos acontecimientos de la siempre agitada política catalana —entre ellos, el supuesto escándalo de espionaje a distintos dirigentes separatistas por parte del CNI— no han provocado cambios sustanciales en la proyección electoral de las distintas formaciones catalanes. Es lo que se desprende de una reciente encuesta elaborada por Feedback para El Nacional entre el 10 y 19 de mayo a partir de 1.000 llamadas telefónicas (con un margen de error del 3,16%). Según el sondeo, el PSC repetiría su victoria de los anteriores comicios con un resultado casi idéntico: si entonces obtuvo un 23,03% de los votos, ahora se haría con un 23,27 (lo que les depararía de 33 a 35 escaños).
Por su parte, Esquerra Republicana de Cataluña se mantendría en segundo lugar con un 21,05% de los sufragios (21,30 en 2021), lo que le otorgaría entre 31 y 34 diputados (en la actualidad tiene 33). La fuerza nacionalista más dañada por unas nuevas elecciones sería Junts per Cataluña, que perdería casi cuatro puntos: de un 20,07% en las anteriores a un 16,27 en las actuales, lo que le llevaría a perder entres 7 o 6 parlamentarios. Mientras, Vox mantendría el cuarto puesto (8,37%), prácticamente empatados con En Comú Podem (8,6%), que aumenta casi dos puntos. Por último, la CUP se queda igual (6,71% ahora frente a un 6,68% en las pasadas); Ciudadanos desciende (3,8%, lo que les dejaría entre 3 y 4 diputados, y el PP renacería (5,42%), pasando de 3 a 6 o 7 diputados.
¿Está dispuesta ERC a ceder el liderazgo al PSC?
El hecho de que ERC se hiciese definitivamente con el cetro del separatismo frente a la declinante JxCAT alimenta una posibilidad que muchas perciben cada vez más cerca: un gobierno tripartito formado por PSC, ERC y comuns. Y es que, si bien los republicanos y los neoconvergentes podrían reunir escaños suficientes para reeditar su coalición nacionalista (sus resultado oscilarían entre los 64 y 70 diputados, siendo necesarios 68 para la mayoría absoluta), también podrían no hacerlo. Mientras, el mencionado tripartito de izquierdas obtendría unas cifras que le permitirían una holgada mayoría: entre 74 y 80 escaños. Sin embargo, muchos se preguntan si Esquerra estaría dispuesta a ceder el liderazgo del Govern y convertir en president a Salvador Illa.