Dos diputados de la CUP en el Congreso, Albert Botrán y Mireia Vehí, han dado hoy la nota durante la sesión y no precisamente por propuestas de interés para el ciudadano. Botrán lo ha hecho por insistir en dirigirse al resto de diputados en catalán y Vehí por grabar el enfado de la presidenta de la Cámara baja, la socialista Meritxel Batet, con su teléfono móvil.
No es la primera vez que Albert Botrán busca provocar en el Congreso hablando en catalán. Ya en 2020 protagonizó una escena similar que tuvo como consecuencia que la presidenta de la Cámara le apagara el micrófono. Lo mismo que ha sucedido este martes cuando Batet, harta de llamarle la atención, ha decidido no permitir que continúe su intervención.
Numerosos diputados han protestado cuando el cupaire, conocido por su afán de provocar, insistía en hablar catalán. Algo que Batet también ha censurado: «Señorías, no necesito acompañamiento. Absténganse de dar pataditas«. La presidenta ha tenido que llamar también la atención a la diputada cupaire Mireia Vehí, que estaba grabando la escena. Le ha recordado que el reglamento no lo permite y le ha exigido que borre las imágenes.