En ERC no están dispuestos a dar su brazo a torcer con respecto al diálogo con el Estado. Y así lo han demostrado este sábado durante la celebración de la conferencia nacional del partido, que se ha celebrado en L’Hospitalet y en la que han participado, entre otros, la secretaria general, Marta Rovira, y el presidente del Govern, Pere Aragonés.
Mientras el Consell per la República de Puigdemont se refiere al Ejecutivo catalán como «Govern autonómico» o «Govern del interior», Rovira y Aragonés tienen claro que solo el diálogo con el Gobierno central permitirá trazar el camino hacia un nuevo referéndum por la independencia. Rovira ha asegurado en este sentido que el Govern ha de sentarse en la mesa de diálogo «sin miedo ni complejos». Fugada a Suiza desde finales desde 2017, Marta Rovira ha participado en el acto de forma telemática y ha afirmado que «ser republicano» quiere decir ahora hacer valer el logro de haber «sentado al Estado» en la mesa de diálogo.
A pesar de que esta mesa se ha reunido solo en dos ocasiones desde enero de 2020 y de que el Gobierno central parece haber congelado la agenda de la misma, Rovira ha señalado que «la mesa es un paso que hay que dar para llegar a la república catalana».
Pere Aragonés, por su parte, ha defendido de nuevo la necesidad de «ampliar la base» del separatismo, así como las acciones en favor del avance de Cataluña. Aragonés ha dado un toque de atención a Puigdemont al recordar que «un país avanza partiendo del principio de realidad» y ha asegurado que Cataluña avanzará cuando tenga «la capacidad de sumar».