La palabras subidas de tono o los insultos son frecuentes en las redes sociales cuando se debate acerca de la cuestión separatista. Sin embargo, la conversación publica se degrada especialmente cuando dichos exabruptos no los profiere un ciudadano desconocido sino una figura con relevancia pública. Esto último es lo que ocurrió ayer cuando el ex jefe de marketing de la Corporación Catalana de Medios Audiovisuales (CCMA), Lluís Carrasco, comparó en Twitter a la portavoz de Junts per Catalunya en el Congreso, Laura Borràs, con una mujer “violada”. El símil hacía referencia a la situación judicial de la política, a la que el Supremo podrá investigar por corrupción después de que la aprobación de un suplicatorio en el Congreso anulase su inmunidad.
El tuit en cuestión rezaba lo siguiente: “Si un grupo se te acerca con la intención de agredir a tu acompañante, puedes hacer dos cosas, hacer frente o huir y dejarla sola bajo las babas de los depredadores… Hoy, en el Congreso, Laura Borràs será violada”. A continuación, Carrasco recriminaba a Esquerra Republicana y la CUP que no hubieran participado en la votación del suplicatorio en el Congreso: “La Cup y ERC no estarán. Han huido”. Luego, en otro comentario, añadía que se trataba de una “metáfora dura”, pero que la mantenía porque “nuestro país y sus representantes están siendo violados”. Sin embargo, a raíz de la polémica generada, Carrasco ha terminado borrando el tuit y cerrando su perfil de Twitter —al menos, temporalmente—.
El PSC lo acusa de “banalizar” la violencia machista
A pesar de ello, el tuit no ha pasado inadvertido para la diputada del PSC en el Parlament, Beatriz Silva, que en la misma red social ha reproducido el texto de Carrasco acompañado de esta reflexión: “Erradicar la violencia machista es uno de los desafíos más importantes que tenemos como sociedad. Banalizarla es la peor forma de avanzar en la lucha contra las violencias que sufren las mujeres por el simple hecho de serlo. No hay excusa que lo justifique”.
Lluís Carrasco fue director de marketing en la Corporación Catalana de Medios Audiovisules (CCMA) entre los años 2000 y 2016, y actualmente es vicepresidente del Club de Marketing de Barcelona. En los últimos años, se ha mostrado crítico —no siempre con las mejores formas— con figuras contrarias al separatismo como Joan Manuel Serrat o Inés Arrimadas. En 2017 fue criticado por publicar una carta de una adolescente que animaba a votar el 1-O e ilustrarla con la foto de una modelo norteamericana.