A lo largo del año 2021 la Fundació Arrels ha acompañado a 2.103 personas sin hogar, el 30% de las cuales por primera vez. Según las cifras provisionales que ha publicado la entidad este martes, la ampliación del equipo de calle ha permitido llegar a todos los distritos de Barcelona y visitar a 844 personas que viven al raso, un 24% más que el año anterior. Además, «hemos garantizado el alojamiento a 249 personas».
«Hemos garantizado el alojamiento a 249 personas».
«A las 2.103 personas atendidas en los últimos doce meses las conocemos porque las visitamos directamente en la calle, vienen a nuestro centro abierto a hacer uso de los servicios básicos, nos han pedido orientación sobre los recursos que existen en la ciudad o viven en alguno de los alojamientos que gestionamos. El 88% son hombres y el 12% son mujeres. De todas estas 2.103 personas, a 642 las hemos atendido por primera vez durante el año pasado».
«A las 2.103 personas atendidas en los últimos doce meses las conocemos porque las visitamos directamente en la calle, vienen a nuestro centro abierto a hacer uso de los servicios básicos».
#Nadiedurmiendoenlacalle
Arrels denuncia que la pandemia ha empeorado la situación de las personas que viven en la calle y ha afectado a los recursos que las atienden. «Ya hace meses que los servicios del Ayuntamiento de Barcelona a los que las personas que viven en la calle deben dirigirse específicamente para pedir ayuda no atienen a todas las personas que lo necesitan; los albergues municipales han dejado de ser de acceso directo y servicios básicos higiénicos, de ropero y de comedor también se han visto afectados durante todo el año».
«Ya hace meses que los servicios del Ayuntamiento de Barcelona a los que las personas que viven en la calle deben dirigirse específicamente para pedir ayuda no atienden a todas las personas que lo necesitan».
En este sentido, los responsables de la entidad han agradecido el apoyo ciudadano a las personas sin hogar. «A nuestro servicio telefónico de orientaciones, por ejemplo, han llamado más de 400 vecinos y vecinas preocupados por personas que viven en la calle en su barrio y más de 300 personas se han implicado como voluntarias durante todo el año en nuestros proyectos«.
«A nuestro servicio telefónico de orientaciones han llamado más de 400 vecinos y vecinas preocupados por personas que viven en la calle en su barrio y más de 300 personas se han implicado como voluntarias durante todo el año en nuestros proyectos».
“Para poder hacer efectivo el objetivo que nadie tenga que vivir en la calle necesitamos que todas las administraciones se coordinen para resolver el problema y también la acción de la ciudadanía; por un lado, para presionar e incidir políticamente y, por otro lado, porque los vecinos y vecinas pueden ser piezas clave en el acompañamiento y el cuidado de las personas que viven en la calle”, dice Ferran Busquets.