Los Mossos d’Esquadra y la Policía Nacional detuvieron ayer a cuatro empresarios de Tarragona como presuntos autores de los delitos de malversación y contra la salud pública. Dos de los arrestados se dedican a la recuperación de metales de Tarragona y Viladecans y los otros son trabajadores de la empresa tarraconense, uno de ellos, caporal de los Mossos en excedencia que actualmente hacía las funciones de apoderado.
Dos de los arrestados se dedican a la recuperación de metales de Tarragona y Viladecans y los otros son trabajadores de la empresa tarraconense, uno de ellos, caporal de los Mossos
La investigación empezó a raíz de una información relacionada con una empresa que se estaría dedicando presuntamente a la venta del material intervenido judicialmente tras la desarticulación policial de plantaciones de marihuana.
La empresa era requerida habitualmente por las unidades de investigación y fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado para dar soporte en las intervenciones judiciales contra las plantaciones de marihuana interiores. De esta forma, se encargaba de desmontar las plantaciones y recogía todos los sistemas de aires acondicionados, luces térmicas y plafones LED, que transportaba a sus naves en calidad de depósito judicial hasta que se autorizase su destrucción.
La empresa se encargaba de desmontar las plantaciones y guardar el material confiscado hasta que el juez ordenase su destrucción
Falsificaban actas de destrucción
La investigación policial comprobó que el material recogido por esta empresa se vendía y se distribuía a terceras personas y, en muchos casos, volvía a formar parte de nuevas plantaciones de marihuana. Además, si constaba la orden de destrucción del material se falsificaba el acta.
La empresa obtenía un gran beneficio económico del material intervenido, normalmente aparatos de un alto valor económico que vendían a un precio más bajo del de mercado. En ocasiones los clientes eran directamente cultivadores de plantaciones de marihuana. En este sentido, los investigadores comprobaron que la empresa recogía, transportaba y almacenaba siempre los aparatos con cuidado para evitar daños que impidiesen su posterior distribución.
Por otra parte, la empresa contaba con una nave específica donde el responsable almacenaba el material. Esta nave no estaba logotipada con el nombre de la empresa y es donde hacía las ventas de forma privada.
Ayer se hizo la fase de explotación de la investigación y se hicieron cuatro detenciones entre las cuales la del caporal en excedencia de los Mossos. También se llevaron a cabo cuatro entradas a naves industriales de un polígono de Tarragona y un domicilio situado en Cunit.
En total, se encontraron más de 400 aires acondicionados, 850 plafones de luces alógenas y 130 plafones de luces led además de material diverso y necesario para instalar plantaciones de marihuana interiores.
En los registros se encontraron más de 400 aires acondicionados, 850 plafones de luces alógenas y 130 plafones de luces led además de material diverso y necesario para instalar plantaciones de marihuana interiores.
El propietario de la empresa también está detenido por un delito contra la salud pública ya que los investigadores descubrieron que un servicio policial le había dejado en depósito un gran cargamento de marihuana para que lo destruyese e hiciese llegar el acta de destrucción. Sin embargo, en lugar de hacerlo intentó procesar la marihuana para venderla de forma ilegal con la que habría obtenido un beneficio de unos 200.000 euros. Finalmente no lo consiguió porque la droga se estropeó.