El programa Planta Baixa de TV3 se ha subido al carro de lo genderqueer y ha comenzado a referirse a las mujeres como «personas menstruantes«, tal y como reclaman diversos colectivos, entre los que se encuentran los de activistas transexuales. Lo ha hecho en un reportaje en el que se relata cómo el Ayuntamiento de Cardedeu busca fórmulas para luchar contra la llamada «pobreza menstrual» y acabar con los tabúes en torno a la menstruación.
La periodista responsable del reportaje, Mireia German, ha explicado, por ejemplo, que el Consistorio ha organizado charlas en los institutos para niños y niñas de 12 años en los que se les explica todo lo relacionado con la menstruación. «A las personas que menstrúan«, ha añadido, «se les entregan unas bragas menstruales». En otro punto del reportaje, German se ha referido a «lo que sucede con el cuerpo de las personas que menstrúan». Y más adelante ha indicado que el Ayuntamiento de Cardedeu ha habilitado espacios para que «las mujeres y las personas que menstrúan» puedan cambiarse la compresa, el tapón o el sistema que empleen.
La expresión «personas que menstrúan» es rechazada de plano por las feministas tradicionales, que la consideran un ejemplo de lo que ahora se llama «el borrado de las mujeres«. Y razón no les falta tal y como se puede comprobar en sus denuncias que realizan sobre todo en redes sociales. Perfiles como @ContraBorrado permiten observar la manera en la que la llamada «religión transgenerista» intenta imponer una visión del mundo en la que la palabra mujer y todas las relacionadas, como «madre», por ejemplo, desaparecen de lo público.
