Nuevo varapalo europeo al procés. En septiembre de este año, el pleno del Parlamento europeo pidió una investigación a fondo de las conexiones entre el separatismo catalán y los servicios secretos rusos a raíz de unas revelaciones de The New York Times, que relataba los contactos entre la mano derecha de Carles Puigdemont, Josep Lluís Alay, y los servicios de inteligencia rusos. Pues bien, ahora, según cuenta El Mundo, un informe de la comisión para analizar las campañas de desinformación y la injerencia extranjera en la Unión Europea presentada por la eurodiputada letona Sandra Kalniete constata la injerencia rusa en el procés y reclama una investigación.
Según el documento, que ha llevado a la eurodiputada un año entero de trabajo, es evidente la «interferencia y la manipulación en las redes» de Rusia en asuntos tales como «el referéndum del brexit en Reino Unido o las elecciones presidenciales en Francia y Estados Unidos». A ello se le suman otras tentativas de desestabilización como el respaldo ruso «a la extrema derecha y otra fuerzas radicales que actúan en Europa» o los «recientes hallazgos acerca del cercano y regular contacto entre oficiales rusos con representantes del independentismo catalán».
Empecinamiento ruso
Ante estos «constantes intentos» de Rusia de fomentar cualquier elemento que «promueva la desestabilización interna y la unión de la Unión Europea», esta comisión especial exige una «investigación a fondo» por parte de las autoridades europeas. Cabe decir que el informe es un paso previo a la propuesta de resolución que será sometida a votación en la Eurocámara y que establecerá la dirección a seguir en este asunto.