El sesgo separatista de TV3 y Catalunya Ràdio es denunciado con frecuencia por numerosas voces dentro del constitucionalismo. Una de las asociaciones que más se ha significado en este sentido ha sido el Grupo de Periodistas Pi i Margall, que, tras pedir el año pasado al CAC que analizase el falso vinculo que el canal de televisión estableció entre el CNI y los atentados de las Ramblas, ha exigido ahora que sus responsables emitan un reportaje sobre la corrupción de Pujol equivalente al que difundieron sobre el Rey emérito.
Así, el presidente del Grupo de Periodistas Pi i Margall, Sergio Fidalgo, ha enviado una carta a la vicepresidenta y presidenta en funciones de la CCMA, Núria Llorach, pidiéndole que “concrete —y haga públicos— los parámetros por los que se rige TV3 para la emisión de un reportaje de autor, sobre un asunto sub iudice y que no cuenta con todas las partes en su tesis”. Este ruego tiene lugar “después de que, hace unos días, la televisión autonómica de Cataluña emitiese un reportaje —producido por una empresa privada para la ETB— sobre la presunta corrupción económica del rey Juan Carlos I, pero se niegue a hacer lo propio con la confesa corrupción económica de Jordi Pujol”.
TV3 alegó que no abordaba el caso Pujol porque la investigación seguía en marcha
Tal y como recuerda la carta de Fidalgo, el director de TV3, Vicent Sanchis, explicó en una comisión parlamentaria el pasado 21 de febrero que si el canal autonómico emitía un reportaje sobre Pujol sin contar con su participación y en un asunto sub iudice se estaría yendo en contra del Libro de Estilo de TV3. A pesar de ello, el “documental sobre la presunta corrupción de Juan Carlos I, que debe ser explicada periodísticamente, no contó con una sola opinión a favor del rey y la investigación judicial no está cerrada”.
Por otra parte, la misiva también destaca que el Parlament constató el pasado febrero que TV3 no tiene previsto emitir “ningún contenido específico sobre los casos de corrupción política, fraude y evasión de impuestos que afectan al expresidente del Govern Jordi Pujol”. Esta decisión, según Fidalgo, perjudica en primer lugar la “imagen y el buen nombre de los profesionales de TV3”.
