Pese a que Plataforma per la Llengua ha lanzado una web para denunciar a los profesores universitarios que usen el castellano o el Govern ha anunciado grupos de vigilancia en las escuelas para que no se hable en la lengua común, el separatismo catalán sigue recurriendo al victimismo lingüístico. Lo ha hecho con el caso de Jordi Juanico, un profesor de la Universidad Autónoma de Barcelona al que se ha otorgado protagonismo mediático por dimitir al no poder dar en catalán las clase de un máster.
El caso es que el master en cuestión estaba programado en castellano, tal y como explicó en TV3 —que ha cubierto el caso con tratamiento estelar— la vicerrectora de Comunicación y Promoción de la UAB, Virgínia Luzón. «La lengua vehicular de este máster se hizo un recordatorio desde la coordinación del máster que sería el castellano, en este caso. Porque hay muchos estudiantes que son extranjeros, que no se han podido desplazar este año por culpa de la pandemia y se estipuló que sería una modalidad hibrida, para que estos estudiantes pudieran conectarse por Zoom», declaró Luzón. Sin embargo, Juanico argumentó que «en cualquier otro sitio del mundo esto no sería una excusa para cambiar de idioma» y que la «gente que viene de fuera deben saber que la lengua del país es la catalana, no otra lengua».
Críticas de un lingüista
El tratamiento dispensado por el canal a lo sucedido —que ha recibido el aplauso de númerosos separatistas en las redes— no ha tardado en recibir críticas por parte del constitucionalismo. Por ejemplo, ésta es la traducción del caso efectuada en las redes por el lingüista Javier Pérez López: «Aclaración: un talibán del catalán, que defiende que en Cataluña solo debe haber una lengua, la suya, aunque el español/castellano sea la lengua familiar de la mayoría de los catalanes, se niega a impartir un curso en la odiada lengua que figura en el programa.»