Prevaricación, odio, abuso sexual a menores y provocación. Estos son los delitos de los que Abogados Cristianos acusan a la alcaldesa y a la concejal de Cultura del Ayuntamiento de Castellón, Amparo Marco y Verónica Ruiz, ambas de Compromís, tras haber entregado a varios centros educativos de esta región libros de temática LGTBI cuyo contenido va más allá de lo escandaloso. La asociación ha presentado la querella este lunes, tras lograr que el pasado viernes la titular del Juzgado Contencioso Administrativo número 1 de Castellón, Carola Soria, retirara como «medida cautelarísima» la treintena de volúmenes que ya habían llegado a varios colegios de educación secundaria.
Fue uno de estos centros el que avisó a Abogados Cristianos tras comprobar que algunos de los libros contenían «auténticas barbaridades». Es el caso de Gay Sex, escrito por Gabriel José Martín, escritor, psicólogo, activista gay e intersexual. Este «manual sobre sexualidad y autoestima erótica para hombres homosexuales», tal y como se titula, contiene capítulos tan llamativos como el de «Buscando pollas mientras paseas, el cruising«, «Orgías con luz y a oscuras», «El chemsex desde dentro» o «La injustificada mala fama de la pornografía». Contenidos que, desde el Ayuntamiento de Castellón, se ha considerado que son adecuados para alumnos desde los 11 años.
La presidenta de Abogados Cristianos, Polonia Castellanos, deja claro en su conversación con elliberal.cat que esta asociación «respeta los derechos de todo el mundo» y que «nadie está diciendo que estos libros no puedan estar a la venta en cualquier librería». Sin embargo, Castellanos tiene muy claro que se trata de trabajos que «tienen una marcada tendencia ideológica» y que, además, «no son para niños de 11 o 12 años».
‘Al Obispo le dan por culo’
«Son libros», prosigue la presidenta de Abogados Cristianos, «que están a favor de los vientres de alquiler, del consumo de drogas o de la pornografía. Está claro que no son libros para menores y menos de esas edades». Desde la asociación se considera que, además, el Ayuntamiento gobernado por Compromís ha vulnerado varios artículos de la Constitución, como el 16, que consagra el respeto a la libertad religiosa. Y es que en libros como El fin del armario, de Bruno Bimbi, hay capítulos como «Al Obispo le dan por culo», «El Papa, el sínodo y los maricones» o «Alá no es grande, Jesús no nos ama».
Incitación al sexo
Castellanos subraya el contenido ideológico de estos trabajos y recuerda que «no se pueden repartir a los niños a espaldas de los padres». Además, la entidad considera que, en algunos de ellos, se «incita a los menores a cometer actos sexuales dándoles información demasiado explícita». «Respetamos a todos», concluye la presidenta de Abogados Cristianos, «pero esto que han hecho no es respeto. En lugar de regalar estos libros a cada centro podrían haber enviado libros de texto».
El asunto ha generado gran controversia en la Comunidad Valenciana. Tanto que este lunes la vicepresidenta, Mónica Oltra, ha asegurado que los libros permanecerán en los centros porque, si Abogados Cristianos quiere retirarlos, «tendrá que empezar el proceso de cero» dado que no ha demandado a la Generalitat. Oltra ha afirmado que la decisión de la jueza «sí que es prevaricar«. «No se puede permitir», ha concluido en un acto de protesta celebrado en la Feria del Libro de Castellón, que los jueces no conozcan o no apliquen las leyes, que elijan cuáles les conviene aplicar o no».