Licenciado en Biología por la UAB, fue alcalde de Terrassa los años 2003, 2007 y 2011 y candidato a la presidencia de la Generalitat por el PSC. Desde julio de 2018, es el delegado especial del Estado en el Consorcio de la Zona Franca de Barcelona (CZFB) por el gobierno de Pedro Sánchez, siendo nombrado presidente del Comité Ejecutivo. Desde ayer, junto a Blanca Sorigué, está al frente de la Segunda edición de la Barcelona New Economy Week, un evento disruptivo sobre el cual profundizamos para Elliberal.cat.
¿Ha generado nuevo negocio la primera edición de la BNEW?
Se hicieron 25.000 contactos, una cifra estimulante. Aún no tenemos datos de conversión en negocio, aunque esperamos que sean elevados.
¿Qué destacaría de esta segunda edición?
Este año tenemos tantas inscripciones internacionales como el año pasado. lo cual es un gran éxito, ya que este año hay muchos más eventos en la ciudad. Un dato interesante: la mayoría de inscritos, tanto el año pasado como este año, son CEOs de sus empresas. Es decir, si tenemos 11.000 inscritos, es equivalente a tener 11.000 empresas.
¿Y las start-ups?
Tenemos más de 1.000 start-ups inscritas, una cifra parecida a la del año pasado. El próximo jueves otorgaremos los premios a las start-ups en cada uno de los apartados.
«Los eventos ya no son sectoriales, se han hecho holísticos»
¿Más speakers? ¿Más paises?
El año pasado teníamos 400 speakers y este año tenemos 800. Cabe subrayar la participación de América Latina, también la de los países asiáticos y, este año, la de Rusia, que llama la atención, porque tenemos una diferencia horaria importante. Por franjas horarias, el evento es más compatible con Europa, África y América.
¿Son Europa, África y Latinoamérica las áreas de influencia?
Queremos que sea un evento global. Hemos actuado en el área atlántica y menos en Asia, porque no se puede abarcar todo. Este concepto de evento no existía, es híbrido de verdad. Hay presencia física, pero también una plataforma digital que permite interaccionar con todas las personas registradas.
Una nueva globalidad digital…
Al final, la BNEW estará abierta las 24 horas del día. A medio plazo, cuando cierre BNEW Barcelona podrá abrir BNEW San Francisco, por ejemplo, y cuando cierre San Francisco podrá abrir Shanghai. Como la Bolsa, que cierra la de Tokio y abre la de Nueva York…
¿Y a corto plazo?
Queremos incorporar a otras ciudades. Se origina en Barcelona, pero el año que viene podemos ir a Lisboa, o a Londres… bueno, a Londres aún no sabemos, porque faltan…
…transportistas…
Pensamos en Lisboa, en Londres, en Dubai… una red de ciudades BNEW, que coloquen platós y speakers para hablar de Logística, Real Estate, Industria Digital, Ecommerce, Zonas Económicas, Movilidad, Sostenibilidad, Talento, Ciencia y City.
¿Se introducirán nuevos temas?
Creo que estos 9 temas son el límite, y una propuesta integral. Los eventos ya no son sectoriales, se han hecho holísticos. Ya no hablamos de tráfico sino de movilidad, que tiene que ver con la salud o con la logística, que a su vez está muy ligada al mundo inmobiliario.
¿Cambia para siempre el concepto de ferias y congresos?
La BNEW nunca será un Mobile World Congress. Pero no sé si las ferias continuarán siendo tan masivas. Antes, una empresa quizás enviaba 20 personas. Con las tecnologías digitales, quizás viajarán únicamente el CEO, el responsable de expansión y el de relaciones internacionales.
«De cara al año que viene, potenciaremos lo presencial con actos más festivos, que favorecen el networking, aunque manteniendo y perfeccionando lo digital»
¿Será la BNEW más virtual que real?
El año pasado y este, hemos sido muy prudentes por el tema de la pandemia. De cara al año que viene, potenciaremos lo presencial con actos más festivos, que favorecen el networking, aunque manteniendo y perfeccionando lo digital.
¿Cuál es la nueva economía que llega?
Algo que influirá muchísimo son los fondos Next Generation de la UE, 70.000 millones de euros enfocados a la transición ecológica y por otro lado, a la digitalización. Se inicia una nueva fase de la economía europea, con más presencia que antes del tema industrial. El virus tiene bastante que ver, hemos descubierto que tenemos que fabricar en el contexto de la revolución digital, no podemos ser solo una sociedad de servicios.
¿Será la IA un punto de inflexión?
Un tema que está adquiriendo mucha potencia es la inteligencia artificial aplicada al análisis de datos. Ahora tenemos sensores en todas partes que sólo “enumeran”. Pero una vez tenemos los datos, si no se analizan, no sirven para nada. Es lo que hace el Barcelona Supercomputing Center.
«El virus nos ha hecho descubrir que tenemos que fabricar en el contexto de la revolución digital, no podemos ser solo una sociedad de servicios»
¿Podemos amar a China y Estados Unidos a la vez y no estar locos?
En la DFactory de la Zona Franca está Huaweii y, delante mismo, Hewlett Packard. Seguro que trabajarán de forma conjunta. Ahora, hay una empresa China de fabricación de vehículos eléctricos muy bien situada para utilizar la planta que ha dejado Nissan. ¿Nos decantamos más hacia China? No, creamos mesas donde se pueden tratar y desarrollar los temas, abiertas a todos los países y apostamos por la industria, porque crea riqueza. Nosotros no hablamos ni con Joe Biden ni con Xi Jinping, sino con un segmento empresarial muy concreto.
¿Y los intereses de Europa?
Estamos comprometidos en la fabricación del famoso “chip europeo”. Si los países asiáticos, no solo la China sino Singapur y otros, no pueden cubrir nuestra demanda de chips, la industria automovilística de España se queda parada. Ya sabemos cómo está Seat, y hoy la Ford de Almussafes ha tenido que parar la producción. Apostamos por la globalización, pero también por Europa.
Señale nuevas oportunidades en el ámbito de Cataluña.
Una actividad económica con grandísimo futuro es el mundo agro. La industria agroalimentaria se desarrollará de forma muy rápida y muy intensa. Y otro tema, de que hablaremos en el BNEW es la economía azul, ligada al mar como algo a proteger y que genera alimentación, energía y riqueza, con enorme recorrido.
¿Cuál será papel de Barcelona?
Enric Asunción, el fundador y CEO de Wallbox, empresa de cargadores eléctricos inteligentes que empieza a cotizar hoy en la Bolsa de Nueva York, ha tenido muchas propuestas internacionales, pero finalmente se ha decantado por la Zona Franca, y aquí tienen su planta de fabricación. Hay pocas regiones metropolitanas con infraestructuras tan potentes en tan poco espacio: al lado del puerto y el aeropuerto, en una zona metropolitana con talento, con garantías jurídicas…Si arreglamos lo del procés y mejoramos las infraestructuras, ya será impresionante.
¿Por ejemplo, el corredor mediterráneo?
Si se desarrolla de forma intensa, conectando Algeciras con el resto de Europa, el corredor mediterráneo tendrá mucha potencia.
Si disminuimos turismo depredador y hacemos eventos virtuales, ¿hará falta ampliar el aeropuerto?
La región metropolitana de Barcelona es una de las que tiene más espacios protegidos del mundo, empezando por el Montseny, Collserola, San Llorenç, el Garraf, etc. ¿Nos lo hemos de cargar? No, hay que hacer compatible una cosa con la otra. Pero al turismo depredador, hay que controlarlo con normas muy claras.
«Al turismo depredador, hay que controlarlo con normas muy claras»
El tráfico aéreo contamina…
Si, pero tenemos al lado a los barcos, que contaminan más que los aviones, y nadie los cuestiona. Están intentando que, en vez de usar diésel, en el puerto se conecten a una red eléctrica no contaminante. Con los aviones se puede hacer algo parecido. El hidrógeno y las baterías eléctricas evolucionan de forma extraordinaria. Tendremos aviones que no contaminen. Pero si no lo hacemos ahora, cuando pase esta etapa no tendremos un aeropuerto de nivel y otros si lo tendrán. Barcelona necesita unas infraestructuras muy potentes.
