Tras las nuevas medidas aprobadas por el Gobierno, la factura eléctrica ha moderado su escalada, tal y como aseguran desde FACUA-Consumidores en Acción. Del 16 al 21 de septiembre, días en los que han estado vigentes, la media aritmética del precio del kilovatio hora (kWh) en los tres tramos horarios ha sido de 23,98 céntimos (impuestos incluidos). Es decir, un -9,7% menos. Se sitúa pues por debajo de los 26,57 céntimos registrados durante las dos primeras semanas del mes. En septiembre del año pasado, el precio medio del kWh fue de 13 céntimos.
Fuentes de FACUA advierten que la “brutal” subida de precios en el mercado mayorista está contrarrestando parte del impacto a la baja derivado de las últimas medidas aprobadas por el Ejecutivo. De hecho, la subida interanual del recibo se disparaba un 62% en las dos primeras semanas del mes. Del 1 al 14 de septiembre, la factura del usuario medio, extrapolada a un mes completo, alcanzaba los 108,17 euros.
Eso sucedió antes de la entrada en vigor de la bajada de los cargos regulados, la disminución del impuesto especial de la electricidad (al pasar del 5,1% al 0,5) y el tope al precio del gas, el pasado día 16. La subida interanual se ha quedado, posteriormente, en el 52,8%
Medidas «revolucionarias»
Por su parte, Joan Vila, presidente de la Comisión de Energía de PIMEC, califica las nuevas medidas del Gobierno de coalición de “revolucionarias”. “Esto ya se tenía que haber hecho en el año 2006. La ministra Ribera ha sido muy valiente y sabe de qué va todo esto. Los efectos de estas medidas van a ser importantes para todos: empresas y consumidores”, añade. Vila augura: “La luz bajará, de manera importante, este mismo mes, el más alto desde el punto de vista histórico. Podríamos ver caídas de un 48% en el recibo eléctrico”.
Pymes, las más perjudicadas
En nuestro país, las empresas que consumen menos de 20 MWh (megavatios hora), fundamentalmente pymes, pagaron a 24,68 céntimos el kWh (kilovatio hora) durante el año pasado. Se convirtieron así en las que costearon la electricidad más cara, por detrás de Italia y Alemania. El diferencial fue de 17,52 céntimos más el kWh, si se las compara con las grandes empresas. En resumen, las pymes pagaron el kWh tres veces más caro que las compañías consumidoras de 20.000 MWh o más. Son datos extraídos de un informe publicado por PIMEC este mes de julio, a partir de datos de EUROSTAT.
Al respecto, Joan Vila reconoce que no disponen de datos más actualizados, aunque seguramente están por encima de lo que consta en el Informe. Y nos explica a qué se deben estas desigualdades: “Hay dos motivos principales. Por un lado, la lógica del mercado capitalista. A más compra en volumen, más barato sale. Por otro lado, las grandes consumidoras de luz se alimentan a alta tensión. Eso significa que se producen menos pérdidas en la red”.
Además, en función del tipo de negocio, la factura de la luz supone entre un 10 y un 20% de los costes fijos del mismo. En un hotel puede representar un 1% del total; mientras que en una fábrica de procesos puede oscilar entre un 15 y un 16%.