Muchos pensaban que los días en que los que los diputados del Parlament protestaban por el uso del castellano de algunos diputados constitucionalistas habían quedado atrás. Y es que, desde que Ciudadanos normalizó el uso del español en la cámara catalana a partir del 2006, las quejas por el empleo de la lengua común habían desaparecido. Hasta este miércoles. Ese día, el diputado de Junts per Catalunya, Salvador Vergés, protestó durante una comisión en el Parlament por el hecho de que tanto Ciudadanos como Vox efectuaran sus intervenciones en español —que recordemos es oficial en Cataluña y es la lengua mayoritaria de los catalanes (52%).
«Después de dos intervenciones seguidas en castellano, estoy contento de volver a la lengua que debería ser siempre la del Parlament de Cataluña, que es el catalán», manifestó en su turno de palabra. Luego, publicó dicho momento en redes sociales aclarando el motivo por el que se animó a denunciar la mencionada infracción lingüística de los parlamentarios no separatistas: «Me ha salido de dentro».
Defensor del supremacismo
Vergés es conocido por su radicalismo separatista y su talante inequívocamente supremacista. En un discurso pronunciado el pasado 8 de diciembre, el diputado neoconvergente —un ingeniero de Puentes y Caminos «reencarnado en payés emprendedor agroalimentario», tal y como él mismo se ha definido—, proclamó que los catalanes «somos diferentes» del resto de españoles y que «no tenemos nada que ver con esa gente». Asismismo, es partidario de llevar a cabo un boicot a los productos españoles. Por otro lado, por esas fechas trascendió una llamativa fotografía suya en la que aparecía con capucha, emboscado en una estelada y blandiendo un fusil de juguete. Su última polémica la protagonizó el pasado agosto, al defender que el separatismo retome la «unilateralidad» el próximo mes de octubre.