El separatismo catalán no gana para disgustos. Hasta este martes, temía que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, diera plantón a la mesa de diálogo entre el Ejecutivo central y la Generalitat. El socialista ha despejado la incógnita asegurando en una entrevista en TVE que asistirá al encuentro. Sin embargo, los independentistas se han vuelto a sentir molestos al no dejar claro el presidente si participará o no directamente en las negociaciones.
«Lideraré esa delegación del Gobierno», ha dicho Sánchez en referencia al grupo de negociadores que se sentará a la mesa por parte del Estado. Un grupo en el que se encuentran los ministros Félix Bolaños (Presidencia), Yolanda Díaz (vicepresidencia y Trabajo), Miquel Iceta (Cultura y Deportes), Isabel Rodríguez (Política Territorial) y Manuel Castells (Universidades).
Primero con Pere Aragonés
El presidente ha explicado que se reunirá primero con su homólogo autonómico, el republicano Pere Aragonés, para, posteriormente, encontrarse con las dos delegaciones que participarán en la mesa. Una afirmación que, ciertamente, no deja del todo claro, si participará personalmente en esta primera reunión con Aragonés como jefe de la Generalitat.
En la misma entrevista, Sánchez también ha lamentado la suspensión del proyecto de ampliación del Aeropuerto del Prat tras el rechazo de ERC al mismo. El presidente ha recordado que el Gobierno alcanzó «un acuerdo institucional» con la Generalitat sobre esta cuestión a principios del pasado mes de agosto. El acuerdo, en realidad, fue adoptado por Junts y ERC se opuso al mismo días más tarde. Algunos dirigentes republicanos anunciaron que participarían en la manifestación contra la ampliación del aeródromo prevista para el día 19. Y, por si no fuera suficiente, la tercera pata del Ejecutivo catalán, Guanyem-CUP mostró todo su apoyo a la protesta y animó a los ciudadanos a asistir a la misma. Todo esto llevó al Gobierno central a tomar la decisión de suspender el proyecto, a pesar de que, como ha dejado claro Sánchez, el Ejecutivo «apuesta por las inversiones en Cataluña» porque «es de interés para toda España» que esta comunidad «no se quede atrás».