Carlos Carrizosa Torres (Barcelona, 22 de marzo de 1964) es licenciado en Derecho por la Universidad de Barcelona. Aunque entró en política en el año 2006, ocupó su primer cargo público como diputado del Parlament de Cataluña en 2012.
Relevó como cabeza de cartel a la también diputada Lorena Roldán en las elecciones catalanas del 14F de 2021 a las que llegaba con un listón muy alto, después de que los naranjas hubiesen resultado la fuerza política más votada en los anteriores comicios.
Los sondeos resultaron estar en lo cierto y el 14F se confirmó el derrumbe que pronosticaban para la formación, que perdió 30 escaños, pasando de ser la primera a la séptima fuerza política en Cataluña. Carrizosa no fue capaz de acaparar el voto constitucionalista. Sin embargo, esto no es un techo de cristal para quien fuese elegido por unanimidad como cabeza visible del partido. Ahora, sostiene el líder de Cs en el Parlamento, es el momento de demostrar que Cs sigue siendo una fuerza política imprescindible, y no un partido de un solo día.
El portavoz de los naranjas recibe a El Liberal justo cuando se cumplen cuatro años del famoso pleno del 6 y 7 de septiembre de 2017 en que el independentismo decidió traspasar la línea roja y aprobar las leyes de desconexión.
Han pasado cuatro años , ¿Cómo recuerda esos días en el pleno?
Creo que los sucesivos aniversarios a este golpe a la democracia que vivimos los tenemos que ir recordando. No porque sea una efeméride del pasado o algo que no pueda volver a suceder, sino porque aquellos que lo protagonizaron están, hoy en día, influyendo efusivamente en las direcciones de los partidos que nos gobiernan. Han sido indultados, incluso, por aquellos hechos, por parte del gobierno de España. Por tanto, es necesario recordar que lo que vivimos aquí el 6 y 7 de septiembre fue el atropello de los derechos de la mayoría de los catalanes a manos de unas personas que llevaban diez años preparando el terreno para culminar esa declaración de independencia fallida en el Parlamento. Fue fallida gracias a que ha funcionado el estado de derecho, porque su intención era llegar a la independencia y conseguir forrándose en Cataluña, sin que hubiera ningún control.
«Lo que vivimos aquí el 6 y 7 de septiembre fue el atropello de los derechos de la mayoría de los catalanes a manos de unas personas que llevaban diez años preparando el terreno para culminar esa declaración de independencia fallida»
Estos días es noticia el presunto contacto entre el entorno de Puigdemont y Rusia para recabar su apoyo al Procés. Susana Beltrán, ex diputada de Cs contó a El Liberal que durante cinco años intentó, sin éxito, que se rindiesen cuentas sobre la acción exterior. ¿Puede que esta supuesta ‘trama rusa’ sea uno de los motivos por los que nunca se facilitó información ni compareció ningún delegado en el Parlament?
Entre otras cosas sí. Ese es el tipo de cosas que ocultaba el gobierno de la Generalitat y que motivó que hasta un órgano parlamentario encargado de velar por la transparencia y de que se atiendan las solicitudes de los diputados, en innumerables ocasiones se ha pronunciado, censurando al gobierno por la opacidad en toda su acción exterior.
Nosotros hemos pedido las comparecencias reiteradas, no solo de cada uno de los consellers de acción exterior durante el Procés, sino también de los encargados de las supuestas embajadas catalanas y de sus agendas. Nunca han comparecido y nunca han dado explicaciones de en qué se están gastando el dinero público. Ha habido malversaciones que han salido a la luz gracias a esa investigación que, en muchos casos, impulsaba Susana como el lobby americano al que daban dinero. Esto continúa. Hemos visto como la consellera de acción exterior está viajando y ellos confiesan que su único cometido es explicar en el extranjero el Procés. Por tanto, se sigue produciendo un malgasto del dinero de todos los catalanes para fines que interesan solamente a unos cuantos.
«La consellera de acción exterior está viajando y ellos confiesan que su único cometido es explicar en el extranjero el Procés. Por tanto, se sigue produciendo un malgasto del dinero de todos los catalanes para fines que interesan solamente a unos cuantos».
Usted ha comentado en reiteradas ocasiones que Illa ha dejado vacía la silla de la oposición, y esa es la sensación, que el independentismo no tiene oposición. Cs era la alternativa para mucha gente, precisamente por estas cuestiones, por el control al gobierno, la lucha por los derechos lingüísticos, etc. ¿Qué ha pasado?, ¿en qué se han equivocado?
Pues uno de los principales errores es no haber sabido explicar suficientemente nuestra acción política. Yo creo que el hecho de que nosotros tengamos que remarcar que la presencia de Cs ha sido útil, que ha cambiado cosas y que ha conseguido que haya temas que se llevan al debate como, por ejemplo, el de la defensa del uso del castellano. Sin ir más lejos, hoy mismo, con las pruebas de acceso a la universidad, que ha habido una sentencia impulsada por la Asamblea por una Escuela Bilingüe (AEB) y de lo que nosotros nos hacemos eco. Además, hemos preguntado reiteradamente a la consellera Geis por qué no se cumplió la sentencia de junio y avisado de que el año que viene exigiremos que se cumpla esta sentencia.
«La presencia de Cs ha sido útil, ha cambiado cosas y ha conseguido que haya temas que se llevan al debate como, por ejemplo, el de la defensa del uso del castellano».
A toda esta potencia que nosotros desplegamos en la vigilancia de los derechos de muchos catalanes ahora estamos acostumbrados y parece que no tiene mucha importancia, pero hasta que no llegó Cs no existía. No se hablaba el castellano en el Parlamento, y si se hablaba, la gente se levantaba y se iba. Nadie ha denunciado con la contundencia que nosotros el incumplimiento de las leyes por parte del mismo presidente Torra. Este señor, que tiene artículos diciendo que los hablantes de castellano son como bestias taradas, no es presidente ya, porque Cs le denunció a la Fiscalía.
«Nadie ha denunciado con la contundencia que nosotros el incumplimiento de las leyes por parte del mismo presidente Torra. Este señor, que tiene artículos diciendo que los hablantes de castellano son como bestias taradas, no es presidente ya, porque Cs le denunció a la Fiscalía»
Ciudadanos ha instaurado una forma de hacer política en Cataluña que es desacomplejada. Yo creo que sí, desde 2006, nuestra presencia ha cambiado muchas cosas en Cataluña. Es verdad que somos un partido independiente, autofinanciado, que no tiene padrinos y que, por tanto, es objeto del ataque del nacionalismo, de nuestros adversarios del bipartidismo y el de todos los populismos.
Pero eso ya sucedía en 2017 y tenían mucha fuerza en Cataluña
Yo creo que uno de los errores puede ser que no hayamos sabido trasladar ese trabajo y ese compromiso a buena parte de la sociedad, pero todos los partidos siempre tienen sus momentos de altibajo. Nosotros tuvimos un momento de máxima potencia y esplendor en la legislatura pasada y luego tuvimos unas elecciones en las que no nos fue bien, pero esperamos que en sucesivas elecciones nos vayan mucho mejor. Entre otras cosas, porque muchos de nuestros votantes no se fueron a otros partidos, sino que se mantuvieron en la abstención. Nuestro esfuerzo tiene que ser ahora seguir comunicando a los catalanes que Cs sigue siendo una fuerza imprescindible.
«Puede ser que no hayamos sabido trasladar ese trabajo y compromiso a buena parte de la sociedad (…) Nuestro esfuerzo tiene que ser ahora seguir comunicando a los catalanes que Cs sigue siendo una fuerza imprescindible»
Y a nivel interno, el hecho de que saliese gente del partido, en algunos casos a otras formaciones ¿a qué se debe? ¿están trabajando para atraer a nuevos liderazgos y recomponerse para recuperar la confianza perdida?
Sí, justo antes de la pandemia, en el año 2020, culminamos un proceso, después de la dimisión de nuestro anterior presidente, con los resultados electorales de 2019 iniciamos un proceso congresual. Allí resultó elegida por abrumadora mayoría, nuestra presidenta Inés Arrimadas. Ese congreso lo tuvimos que celebrar ya en situación de pandemia y justo después, la sociedad cerró ya a cal y canto toda actividad colectiva. Esto no solo ha afectado a Cs sino a todos los partidos que tienen una base y una militancia activa, a la que le gusta acudir a actos, tener reuniones, etc. Esto, junto a los resultados desfavorables de las elecciones quizás apagaron un poco el nivel vital del partido.
También es cierto que esas deserciones son un porcentaje pequeñísimo del total de los afiliados. Lo más importante de todo en un partido político es que tú representes las ideas que están en la sociedad, y que esas ideas las representes solamente tú. En nuestro caso, representamos al liberalismo centrado, moderado y a la lucha sin complejos contra los populismos, sea de derecha, de izquierda o nacionalista. Como existe un proyecto y un liderazgo y han existido unos resultados adversos y un impás que no ha ayudado a una recuperación, tenemos las bases para trabajar en lo sucesivo hasta las próximas campañas electorales.
«Esas deserciones son un porcentaje pequeñísimo del total de los afiliados. Lo más importante de todo en un partido político es que tú representes las ideas que están en la sociedad, y que esas ideas las representes solamente tú».
El partido debe trabajar para reponerse y no me cabe la menor duda de que como representamos una opción política y tenemos la estructura y el liderazgo nos sobrepondremos y demostraremos que Cs no ha sido un partido solo de un día.
En la convención de julio se definieron como un partido liberal y verde
Sí, hay una revitalización del concepto liberal que era necesaria porque hay partidos que dicen ser liberales, pero solo Cs está encaminado en la familia liberal europea. Además, en España hay que recordar lo que es ser liberal porque siempre se ha asociado al neoliberalismo. Se le ha pretendido teñir de una ideología, como si fuera de derechas y el liberalismo siempre ha antepuesto la libertad del individuo a las consideraciones más identitarias o colectivas. Para garantizar esa libertad del individuo, el liberalismo lo que debe hacer es remover los obstáculos que puedan tener las personas por razón de su nacimiento. Por tanto, también admitimos y fomentamos la intervención del Estado, en todo aquello que sea garantizar la igualdad de oportunidades y la libertad del individuo.
¿Cree que igual no se haya entendido muy bien esta ‘reformulación’ de la ideología sin una evidencia de renovación en el partido?
Nosotros pasamos una larga época bajo la presidencia de Albert Rivera, que es un político excepcional pero que, ante los resultados adversos de 2019, decidió tomar una decisión que le honra en el aspecto personal y dimitía junto a buena parte del equipo de dirección nacional. A partir de ahí se ha producido una renovación en profundidad en el partido. También debemos recordar que hace algunos años no teníamos tantos líderes nacionales conocidos y significados.
«Hace algunos años no teníamos tantos líderes nacionales conocidos y significados».
Tenemos a Juan Marín, que es el vicepresidente de la Junta de Andalucía, un político muy reconocido allí, también a Begoña Villacís como vicealcaldesa de Madrid y a otros políticos como Edmundo Bal, es un nuevo valor descubierto a la política. Yo creo que sí ha habido una irrupción de caras nuevas que participan de la dirección del partido, que se ha renovado íntegramente. Estamos en el buen camino, hemos de trasladar esto a fuera y a nuestra militancia pero la renovación, sin duda ninguna, se ha producido.
«Estamos en el buen camino, hemos de trasladar esto a fuera y a nuestra militancia pero la renovación, sin duda ninguna, se ha producido».
¿Cuáles van a ser las prioridades de Cs de cara al nuevo curso político?
Hoy mismo hemos anunciado una iniciativa legal para la gratuidad de los libros de texto en la enseñanza obligatoria y se lo voy a poner esto como ejemplo. También hemos iniciado la redacción de una proposición de ley para extender esta gratuidad a los estudiantes de Formación Profesional.
«Hemos anunciado una iniciativa legal para la gratuidad de los libros de texto en la enseñanza obligatoria e iniciado la redacción de una proposición de ley para extender esta gratuidad a los estudiantes de Formación Profesional».
Nuestro empeño en esta legislatura va a ser que los esfuerzos económicos de la Generalitat vayan directamente a paliar las carencias económicas que tienen muchísimas familias en Cataluña. Eso es una forma de combatir el Procés porque luego hay la vertiente de los derechos políticos de los ciudadanos que no pueden verse vulnerados perpetuamente por personas que no respetan la democracia. Contrariamente al partido socialista, que parece que quiere pasar de puntillas y garantizarse así el gobierno de España a cambio de dar cierta facilidad al separatismo en Cataluña, nosotros creemos que estamos en la obligación de seguir abanderando esta lucha por los derechos de la ciudadanía y por la denuncia de los excesos del nacionalismo.
Illa tampoco está a favor de la autodeterminación y la amnistía. De hecho, hace poco fue el blanco del independentismo por decir que los años del Procés han sido los peores de los últimos 300 en Cataluña.
Sí, pero eso son palabras que me gustaría que descendieran a la defensa cotidiana de los derechos de los catalanes. Por ejemplo, nosotros hemos pedido la comparecencia del conseller de educación para que nos explique qué medidas ha tomado para implantar la sentencia del TSJC, que dice que ha de darse un mínimo del 25% con carácter general en todo el sistema educativo en castellano.
Sobre las declaraciones de Illa: «Son palabras que me gustaría que descendieran a la defensa cotidiana de los derechos de los catalanes»
El partido socialista está agazapado sin decir ni pío en eso y en lo de las pruebas de acceso a la universidad, exactamente lo mismo. En el tema de los avales a los malversadores el partido socialista se ha puesto de perfil aquí. Las políticas del partido socialista en Cataluña no están encaminadas a proteger los derechos de los catalanes, sino a no molestar los designios de Pedro Sánchez.
Elisenda Paluzie dijo el pasado domingo en una entrevista a El Punt Avui que la prioridad es preparar una DUI estable. La presidenta de la ANC habló de un independentismo empoderado mientras otros sostienen que está más desmotivado y dividido que nunca. ¿Qué piensa usted?
El independentismo, ni mucho menos se está desmoronando, muestra de ello, por ejemplo, las declaraciones de Puigdemont que vienen a decir que tienen a España enfrente por lo que no va a ser una independencia inocua, sino que nos va a costar sangre, sudor y lágrimas. A la vez, un concejal de JxC en Altafulla y profesor en una universidad pública estaba diciendo que para la independencia en Cataluña hacen falta 10.000 soldados. A la vez, la ANC convoca manifestaciones que a nuestro parecer, por eso hemos pedido la comparecencia del conseller Elena, pone en peligro la Jefatura de la Vía Laietana.
«El independentismo, ni mucho menos se está desmoronando, muestra de ello, por ejemplo, las declaraciones de Puigdemont que vienen a decir que tienen a España enfrente por lo que no va a ser una independencia inocua, sino que nos va a costar sangre, sudor y lágrimas».
El independentismo no renuncia en absoluto a sus postulados. Es más, somete al gobierno de España a chantaje en una mesa en la que se viene a decir que o se aceptan los postulados del independentismo o en dos años la CUP y Junts tienen abiertas todas las posibilidades. Nunca han renunciado a otra declaración unilateral de independencia. Por tanto, lo que hay es un espejismo de unanimidad, de calma que precede a la tormenta. Ese es nuestro parecer.
¿Junts y la CUP dejarán que Aragonés acabe la legislatura?
Nosotros creemos que en absoluto. Hoy mismo la CUP ponía en tela de juicio su apoyo a los presupuestos, que la vieja competencia que se suscitó cuando estaba Puigdemont al frente y Junqueras y Marta Rovira, en los días previos al golpe. Todo el mundo sabe que Puigdemont declara la independencia y tira por la calle de enmedio y no convoca elecciones, como tuvo oportunidad de hacer, precisamente porque le apretaban Junqueras y Marta Rovira para hacer ver que el independentismo puro era ERC y que los blandos eran los de Junts per Cataluña. Ahora va a suceder exactamente al contrario, que Junts intentará demostrar que los de ERC son unos blandos. Como ocurre siempre en todos los movimientos radicales, quienes al final triunfan y se enseñorean son las facciones más radicales.
Entre ERC y Junts existe una competición para ver quién llega más lejos y esto ya nos llevó a lo que ocurrió hace cuatro años en el Parlamento y, sin duda, va a volver a ocurrir. Ese es el proyecto de Junts per Cataluña para desbancar a Aragonés.
En una entrevista a Europa Press dijo usted que la ciudadanía no ha notado ningún cambio ni mejora en estos 100 días de gobierno. ¿Apoyaría Cs una reforma para que el estado recuperase ciertas competencias?
Yo creo que plantearse en este momento reformas estatutarias o constitucionales es un poco ilusorio dada la distribución política que existe en las instituciones. Nosotros siempre hemos dicho que si hay que abordar una reforma constitucional, hay que abordarla para clarificar las competencias del estado y de las comunidades autónomas. Ahora me conformaría con que los dirigentes del gobierno de la Generalitat cumplan la ley. Ya han empezado con mal pie torciendo la ley para afianzar a los autores de malversación con los fondos del Institut Català de Finances por eso nosotros repetimos que nuestra oposición la haremos en el Parlamento, en la calle y en los tribunales cuando corresponda.
¿Cree que es posible la solución al conflicto catalán a través del diálogo?
Yo creo que hay que dialogar siempre pero lo que no hay que hacer es ceder a postulados antidemocráticos y no hay que hacer concesiones a aquellos que nunca van a estar satisfechos. Hay que advertir que si hay cambios pueden ir en sentido contrario porque las negociaciones no se montan para que siempre ganen unos. Se deben montar de buena fe y en el marco de la legalidad.
Todo lo que no sea en el marco de la ley supone un abuso y un chantaje, eso es lo que estamos viendo con esa llamada mesa de diálogo que es un chantaje de quien se sienta en una mesa y dice, no me des lo que quiero, te la voy a liar dentro de dos años.