«Queremos manifestar nuestro ‘profundo malestar’ por el hecho de que Quim Torra se haya reunido con los empresarios y no con los trabajadores de las compañías auxiliares que trabajan para Nissan», ha recalcado Josep Álvarez, secretario general de UGT, durante la rueda de prensa posterior a la reunión de las secciones sindicales de la UGT con empresas auxiliares proveedoras de Nissan, celebrada en la sede del sindicato situado en la Rambla Santa Mònica, 10, esta mañana.
“Las personas que trabajan en las empresas auxiliares subcontratadas por Nissan tienen el mismo compromiso y consideración que los empleados de Nissan, por parte de la UGT”, ha añadido Álvarez, quien ha hecho público que algunos trabajadores de estas compañías aún no han cobrado los ERTES, aunque no ha facilitado cifras sobre el número de personas afectadas.
«Queremos actividad industrial en Zona Franca»
Asimismo, Álvarez ha insistido en lo que ya dijeron durante la reunión con los trabajadores de Nissan realizada la semana pasada: “No queremos ningún almacén de logística en la Zona Franca. En su lugar pedimos que se mantenga la actividad industrial, preferentemente de la propia Nissan, o incluso de la alianza Nissan-Renault-Mitsubishi. Esa es la mejor garantía para mantener los puestos de trabajo directos e indirectos”.
Por su parte, Camil Ros, secretario general de UGT en Cataluña, ha querido dejar constancia del malestar de los sindicalistas por las políticas industriales que se hacen en Cataluña y el resto del país. «No necesitamos inmobiliarias ni APIS que se dediquen a comprar naves. Las reuniones son para tratar soluciones pensadas para Nissan y el parque de automoción que trabaja para ella». Además, Ros ha insistido en que la Generalitat debería admitir de una vez que los sectores automoción y agroalimentario son claves para la economía catalana.
“No queremos ningún almacén de logística en la Zona Franca. En su lugar pedimos que se mantenga la actividad industrial, preferentemente de Nissan o incluso de la alianza Nissan-Renault-Mitsubishi. Esa es la mejor garantía para mantener los puestos de trabajo directos e indirectos”
Josep Maria Álvarez, secretario general de UGT
En el encuentro ante los medios también han participado Pedro Hojas, secretario general de la UGT Fica; Antonio Rudilla, secretario general de la UGT Fica de Cataluña y Javier Trenado, secretario general de la sección sindical de UGT FICA en Acciona Facility y representante de la comisión creada para el seguimiento de las empresas auxiliares afectadas por el cierre de Nissan en Barcelona.
Un total de 5OO empresas afectadas por el cierre
Durante el encuentro, se ha dado a conocer también el comunicado enviado por las secciones sindicales de la UGT en el que valoran, con cifras, el posible impacto del cierre de los centros de Nissan -Zona Franca, Montcada i Reixach y Sant Andreu de la Barca- en Cataluña. Ya no se trata únicamente de los 3.000 puestos de trabajo directos de Nissan que se pueden destruir, sino también de los casi 22.000 empleos de empresas proveedoras y auxiliares amenazadas por el anuncio de la marcha de la marca nipona. Desde las Secciones Sindicales UGT Fica alertan que existen más de 500 empresas que se pueden ver afectadas, en mayor o menor medida, por el cierre de los centros. Ello daría también una idea de su repercusión en el tejido industrial catalán.
Entre las reivindicaciones plasmadas en el comunicado destacan la creación de un Plan Industrial conjunto entre administraciones públicas, gobiernos y sindicatos que garantice la viabilidad de Nissan y la industria auxiliar; un Plan de prejubilaciones que permita acceder a pensiones dignas para el sector; que Nissan destine una partida económica para minimizar el impacto que su decisión pueda ocasionar en las plantillas de estas empresas, así como el fortalecimiento del sector industrial catalán y su mano de obra. Cataluña concentra el 23% del total de la industria de todo el estado, representa más de un 20% del PIB y emplea a más de 460.000 personas, según la UGT.