Los rectores de las cuatro grandes universidades catalanas, Oriol Amat (Pompeu Fabra), Daniel Crespo (Politécnica), Joan Guàrdia (Universitat de Barcelona) y Javier Lafuente (UAB) han defendido este viernes en la Universitat Catalana d’Estiu el objetivo de transformar los llamados «países catalanes» en «una nación normal«. Y, con este fin, han manifestado su apoyo a que el catalán se convierta en la única lengua en las universidades de esta comunidad autónoma.
El más contundente en su defensa del catalán como única lengua universitaria ha sido el rector de la Autónoma, quien ha asegurado que «hay que recuperar el catalán al máximo nivel» y convertirlo en «la lengua normal de comunicación». «Este es nuestro pequeño país», ha dicho Javier Lafuente, «y puede haber estudios complementarios en inglés o castellano pero el catalán tiene que ser la lengua de comunicación».
La neutralidad «no es factible»
El controvertido Joan Guàrdia, por su parte, ha defendido la necesidad de dejar a un lado la neutralidad en las universidades, consagrada por la ley. Una declaración de intenciones, cuando menos, sorprendente considerando que la Universitat de Barcelona que dirige ha sido condenada recientemente por el TSJC por vulnerar, precisamente, la neutralidad al apoyar públicamente a los condenados por el referéndum ilegal del 1-O. Guàrdia ha asegurado que la neutralidad «no es factible«. Ha añadido que la falta de imparcialidad debe estar, eso sí, «justificada por la ciencia» y ha subrayado que, a lo largo de su historia, la Universitat de Barcelona se ha visto obligada a «opinar» sobre diferentes cuestiones que afectaban a la sociedad catalana.
Menos reivindicativos se han mostrado los rectores de la Politécnica y de la Pompeu Fabra. Daniel Crespo ha asegurado que celebrar un debate sobre la regeneración democrática es «la crónica de un fracaso» porque «hace 50 años» los catalanes creyeron que, con la Constitución, podrían crear «un país normal» y no ha sido así. En su opinión, el «régimen» se está descomponiendo por culpa de la «corrupción» y Cataluña «es lo que ha reventado las costuras» de España.
El rector de la Pomeu, Oriol Amat, ha recordado, finalmente, el papel de la universidad en la sociedad y ha subrayado que, entre sus funciones, está la de «formar buenos ciudadanos«. Amat ha defendido el derecho de las universidades a «opinar y ofrecer ideas para resolver los problemas» de la sociedad y, al igual que el resto de rectores, ha reclamado al Govern una mejor financiación de estos centros para que puedan cumplir las funciones para los que fueron creados.