Los graves incendios que sufrió la localidad costera de Llançà a mediados del mes pasado sirvieron al separatismo para cargar contra España una vez más, denunciando que el Estado había impedido que avionetas antiincendios francesas participasen en la extinción del fuego. Por un lado, el director general de Prevención, Joan Delort, se mostró «cabreado» con el Gobierno central por estos hechos, criticando su «falta de visión». Por otro lado, la presidenta del Parlament, Laura Borràs, responsabilizó al «Estado» de la deflagración, cuya actitud reforzaba la necesidad de la «independencia» de Cataluña.
Sin embargo, mientras la Generalitat culpaba a España del incendio, mantenía tres hidroaviones del Govern en tierra que podían haber sido usados para combatir el fuego. Así lo ha explicado Ignasi Figueras, uno de los dos pilotos fijos de hidroaviones en Cataluña, en una entrevista en Vilaweb. «Había tres aviones de la Generalitat, los dos de Igualada y el de Alguaire, parados en tierra», desvela Figueras. Por este motivo, el piloto sostiene que «es un poco incongruente pedir apoyo cuando no aprovechas todos tus medios».
Por otro lado, Figueras admite que «si movilizas todos los medios, el resto del territorio queda desprotegido, pero esto también les pasa a los franceses y los españoles si te vienen a echar una mano». Así pues, considera que «si hay un incendio hay que ir con todo lo que tienes y apagarlo». Y añade: «Si después el espacio aéreo permite más medios y son necesarios, pues los pides. Primero en el ministerio, después al ejército y finalmente fuera del Estado».
La falta de «escrúpulos» del Govern
Al conocerse que la Generalitat disponía de medios propios para combatir el fuego mientras denunciaba el veto del Gobierno a recurrir a hidroaviones franceses, algunas voces constitucionalistas han mostrado su indignación en las redes. Es el caso de Sociedad Civil Catalana, entidad para la que el ocultamiento de información practicado por el Govern durante el incendio en Llançà deja en evidencia «la indignidad del separatismo».
Por su parte, las declaraciones de Delort o Borràs contra el Estado han llevado a la diputada popular Eva Parera ha denunciar lo que considera «una clase política decadente y sin escrúpulos».