Un nuevo caso de hispanofobia separatista está corriendo como la pólvora en las redes sociales. No son pocos los tuiteros que están compartiendo una publicación de un monitor de un campamento de verano de Olesa de Montserrat que se jactaba de haber prohibido a un niño asistir a las instalaciones luciendo una camiseta de la selección española de fútbol. «Hoy en el campamento de verano un niño ha venido con el uniforme de la selección española pero ya le hemos avisado de que así no podía venir», publicó ayer Pol Lluch, incluyendo un emoticono sonriente al final de la frase. Al constatar la reacción indignada de numerosos usuarios constitucionalistas, Lluch —que formó parte de las listas de la CUP de la mencionada localidad— terminó borrando no solo el tuit, sino también su perfil de Twitter.
Pese a ello, la captura de pantalla del tuit ha circulado con profusión en las redes, despertando abundantes muestras de rechazo en el ámbito no nacionalista. Entre ellas, la del columnista de El Español David Mejía, que ha señalado que lo peor había sido «la sonrisita al final del tuit», o la del ensayista y columnista de El Mundo Juan Claudio de Ramón, que ha afirmado irónicamente: «¡No hay pruebas de que el ambiente [en Cataluña] sea malo!». Por su parte, la exdiputada de Ciudadanos en el Parlament Sonia Sierra ha interpelado al Ayuntamiento de Olesa de Montserra exigiendo explicaciones. «Hola, Ayuntamiento de Olesa de Montserrat, ¿es cierto que se trata así a los niños en los casales? ¿Les parece normal prohibir equipaciones deportivas por criterios ideológicos?», ha inquirido Sierra.