Miles de personas se han manifestado este domingo en la madrileña Plaza de Colón para mostrar su rechazo a la previsible concesión de indultos por parte del Gobierno del socialista Pedro Sánchez a los líderes de la intentona golpista catalana de 2017. La Policía Municipal de Madrid ha cifrado en 126.000 los participantes en la convocatoria de Unión 78, mientras que la Policía Nacional, dependiente del Ministerio de Interior, ha rebajado esta cifra hasta los 25.000.
Lo cierto es que la plaza ha estado abarrotada en esta calurosa mañana de domingo de miles de españoles que no están dispuestos a aceptar que el llamado conflicto catalán, creado por los separatistas, se salde con una medida de gracia que permitiría a los líderes del procés volver a intentar una declaración unilateral de independencia, tal y como ellos mismos han manifestado en repetidas ocasiones con la ya icónica afirmación de «ho tornarem a fer«.
Sedición y malversación
«Estamos aquí para mostrar nuestro radical rechazo a la concesión de indultos a los condenados por cometer los delitos de sedición y malversación en Cataluña», ha dicho desde el estrado Rosa Díez, una de las caras más visibles de Unión 78, «consideramos que tales indultos representan un grave atentado contra la democracia, perpetrado en este caso por el propio Gobierno».
El intento de deslegitimar esta protesta por parte del Gobierno y de sus socios tachando a sus convocantes y participantes de ultraderecha ha sido respondido por el escritor Andrés Trapiello, que, junto al presidente de la organización universitaria catalana S’ha Acabat, Yeray Mellado, ha leído el manifiesto de Unión 78 contra los indultos.
Trapiello ha dejado claro que a la llamada de esta plataforma cívica han asistido españoles de derechas, de centro y de izquierdas. Pero, sobre todo, ciudadanos que quieren defender el orden constitucional. «Nadie es facha por decir hoy lo mismo que decía el presidente del Gobierno hace unos meses«, ha advertido Trapiello, recordando que Pedro Sánchez se comprometió a no indultar a los separatistas.
Casado, Abascal y Arrimadas
Con lemas como Puigdemont a prisión, Madrid será la tumba del sanchismo y España no se vende, España se defiende, los miles de asistentes a la convocatoria de Unión 78 han mostrado al Gobierno su rechazo absoluto a los indultos y a una negociación con los separatistas que pueda poner en peligro la unidad y estabilidad del país. Junto a ellos se han manifestado también Pablo Casado (PP), Santiago Abascal (Vox) e Inés Arrimadas (Ciudadanos). Han evitado, eso sí, una nueva foto de Colón que pueda seguir dando alas a la izquierda y a los separatistas contra los constitucionalistas españoles.
El presidente del PP ha exigido a Sánchez que «no venda la soberanía nacional y la unidad de los españoles por un puñado de votos«. También ha reclamado al socialista que «mire a la cara» de sus conciudadanos y les explique «por qué les quiere robar una parte de su nación».
El líder de Vox, por su parte, ha sido uno de los más aclamados por los manifestantes. Abascal ha asegurado que «los indultos son una traición a todos los españoles que respetan la legalidad y la Constitución». Y ha añadido: «Pedro Sánchez es capaz de hacer mucho daño».
Arrimadas, que ha llegado a Colón entre gritos de «traidora», ha pedido «justicia y democracia» para España y ha recordado que el presidente del Gobierno «se presentó a las elecciones sabiendo que los españoles no querían indultos y se lo prometió».
Ayuso apunta al Rey
Muy controvertida ha sido, finalmente, la intervención de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, a las puertas de la sede del PP poco antes de participar en la manifestación. Ayuso ha apuntado directamente al Rey Felipe VI y ha acusado al PSOE de «pretender robarle la soberanía al pueblo español». Ayuso ha reivindicado el papel del monarca y se ha preguntado «qué va a hacer a partir de ahora». «¿Va a firmar esos indultos?«, ha dicho, «¿le van a hacer cómplice de esto?».
