La relación entre el Gobierno y el separatismo continúa estrechándose. Después de que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, allanase el camino para conceder los indultos a los presos separatistas que perpetraron el golpe del 2017 alegando que lo contrario sería caer en la «venganza» y de que el Ejecutivo haya agilizado la reforma del delito de sedición, los gestos hacia el secesionismo —pese al coste que estos puedan acarrearle en la Cataluña constitucionalista y en el resto de España— no dejan de sucederse.
En esta ocasión, la que ha dirigido un guiño al secesionismo ha sido la ministra de Derechos Sociales y Agenda 2030, Ione Belarra, que ha salido en defensa de los indultos para que el «diálogo fructifique» y ha abogado por que puedan regresar a España los fugados de la Justicia —entre ellos, el expresident Carles Puigdemont— para finiquitar lo que el separatismo y el entorno de Podemos llama «judicialización» del conflicto catalán. «Yo creo que esa salida de España tiene que ver también con el propio proceso de judicialización, es una derivada, y acabar con este proceso tiene que ver también con que ellos puedan regresar, claro», ha mantenido la ministra y candidata a secretaria general de Podemos, en una entrevista en Rac1.
«No es normal que no esté en España»
A este respecto, ha mantenido que se debe «normalizar la situación» y que «no es normal que no estén en España» los que huyeron, incluyendo a Puigdemont. Desde este punto de vista, ha juzgado que representaría una «incongruencia descomunal» defender la detención de Puigdemont si cruza la frontera española.
No, no, mejor que se queden donde están, pero que no vivan a expensas de los españoles, ya que los odian tanto. Ya no mamen, pues