La batalla que está librando parte del constitucionalismo contra la vulneración de los derechos lingüísticos de los castellanohablantes en Cataluña se encuentra en un momento particularmente intenso. La Asamblea por una Escuela Bilingüe (AEB) ha presentado un escrito al Tribunal Superior de Justicia de Cataluña en el que denuncia al Govern por no haber dado «exacto cumplimiento» a la orden del tribunal de ofrecer a cada alumno las pruebas de la Selectividad en catalán, castellano y aranés para que éste pudiese elegir —como es sabido, las pruebas se entregan por defecto solo en catalán, y si el alumno desea un copia en castellano debe pedirlo expresamente y su petición se registra como «incidencia»—.
En el escrito, se pide que el tribunal requiera personalmente a la consellera de Investigación y Universidades, Gemma Geis, y al secretario general del Consell Interuniversitari de Cataluña (CIC), Josep Ribas, para que se cumpla el auto durante los días que quedan de selectividad y advierte de un posible delito de desobediencia si no lo hacen. Y es que, tal y como da cuenta el texto, en las aulas se colgaron carteles informando de que los exámenes estaban disponibles en los tres idiomas pero verbalmente no se dijo, sino que se preguntó si les parecía bien recibir el enunciado en catalán. Esto implica «dar preferencia una de las lenguas oficiales sobre las otras», según la AEB. También recuerda que hacer figurar la elección del alumno en una lista también puede conllevar falta de libertad para elegir.
Geis critica las intenciones del TSJC
Pese a ello, la consellera de Investigación y Universidades, Gemma Geis, ha negado tajantemente que con las medidas adoptadas por su conselleería «se esté desobedeciendo nada» ya que el modelo actual está amparado por el «marco normativo» vigente. Sin embargo, Geis ha atribuido «un punto de mala fe» al TSJC al dictar el auto que obligaba a ofrecer los exámenes en las tres lenguas oficiales. «No es muy normal que en menos de cinco días la conselleria de Universidades una notificación del TSJC», ha asegurado. Y ha concluido: «No se puede ganar en el ámbito judicial aquello que no se ganaría en el Parlament».