“Existe la necesidad imperiosa de ampliar el Aeropuerto de Barcelona para convertirlo en un hub internacional que permita una mayor reactivación de la economía. Esta ampliación reafirmará el potencial de Barcelona como capital mundial de la nueva economía”. Así lo ha asegurado Pere Navarro, delegado del Estado en el Consorci de la Zona Franca, durante su intervención en una sesión virtual para el Cercle d’Infraestructures. Ello convertiría en ejemplo de innovación y sostenibilidad, a una de las mayores infraestructuras de la ciudad, en opinión de Navarro.
El Consorci se suma así a las 200 entidades empresariales que han firmado un manifiesto a favor de la ampliación del aeropuerto barcelonés. El proyecto, con una inversión de 1.700 millones en cinco años, tiene entre sus detractores al Ayuntamiento de Barcelona.
Compromiso con la Agenda 2030
Pere Navarro también ha reafirmado el compromiso del CZFB con la Agenda 2030 y los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas. «Queremos convertirnos en embajadores de los ODS para construir una nueva cultura industrial sostenible de la mano de todas las empresas de nuestro entorno”.
El delegado del Estado en el Consorci considera a Barcelona única en el mundo, por la ubicación de sus principales infraestructuras. «En pocos kilómetros, se concentran el Port de Barcelona, el aeropuerto y la Zona Franca. Ello dota de un gran valor logístico a la Ciudad Condal”.
Por último, ha recordado la apuesta del CZFB por la nueva economía y la industria 4.0 con proyectos como la 3D Incubator, la primera incubadora de alta tecnología en impresión 3D, impulsada junto a Leitat, con la ayuda de fondos FEDER. También ha avanzado la próxima apertura de la DFactory Barcelona este verano. “La factoría del futuro, también con Leitat como partner tecnológico, se convertirá en un referente de la industria 4.0. Será un espacio donde querrán estar todas las empresas que tengan la innovación como prioridad en su proceso de producción”, ha asegurado Navarro.