Waterloo denuncia que se ningunee a las bases de Junts

Pese a que finalmente Esquerra Republicana y Junts per Cataluña hayan superado sus diferencias y alcanzado un preacuerdo para formar Gobierno, la tensión entre ambas formaciones no se extinguido. Por una parte, el secretario general de JxCAT, Jordi Sánchez, ha afirmado esta mañana en una entrevista en Catalunya Ràdio que la «desconfianza ha sido el gran adversario de este acuerdo» y aún no se ha conseguido «expulsarla del todo». Por otra parte, en Waterloo tampoco parecen excesivamente satisfechos con los términos en que se ha forjado el pacto.

Así, la eurodiputada Clara Ponsatí ha denunciado que los neoconvergentes vayan a facilitar la investidura de Pere Aragonès a través de una votación interna en la que las bases de Junts se limitarán a decidir que si entran en el Govern o se quedan fuera de él. «¡Venga! ¿Y qué más», ha manifestado la eurodiputada en un tuit en el que compartía una noticia de Vilaweb que informaba de la disposición incondicional de JxCAT a posibilitar la investidura de Aragonès.

Junts no contempla elecciones «en ningún caso»

Y es que, tal y como ha informado Sánchez, la idea es facilitar la investidura del líder republicano independientemente del resultado de la consulta a los militantes neoconvergentes. «En el caso, poco probable, de que no se aceptase el acuerdo, la consecuencia sería facilitar la investidura sin entrar a formar parte del Govern. No contemplamos el escenario de las elecciones», ha expuesto Sánchez.

La consulta a la militancia, de la que aún no se conoce la pregunta, tendrá lugar entre hoy y mañana. Asimismo, las ejecutivas también deberán validar el acuerdo. Una vez se cuente con estos avales, la previsión es que el pleno de investidura tenga lugar entre el jueves y el viernes, y que Aragonès sea investido en primera vuelta. Éste tomaría posesión del cargo la semana que viene, mientras que sus consejeros lo harían justo después.