Para Societat Civil Catalana el principio de acuerdo de formación de un nuevo gobierno de coalición entre ERC y Junts per Catalunya no es más que una farsa y «el sainete que hemos vivido los catalanes durante el último año».
A través de un comunicado, la entidad constitucionalista ha recordado que Cataluña se encuentra con un gobierno provisional totalmente dividido que ha sido incapaz de ponerse de acuerdo, incluso en plena pandemia, con una crisis socioeconómica que bien requiere una gestión responsable y coordinada.
«El gobierno que se intuye nace marcado por la desconfianza interna y lleva el sello de los antisistema. Es un matrimonio de conveniencia para repartirse el poder y para mantener las apariencias ante un público al que no se atreven a decir la verdad», continúa el comunicado.
«El gobierno que se intuye nace marcado por la desconfianza interna y lleva el sello de los antisistema»
SCC advierte de que «no podemos esperar nada bueno de un gobierno que nace bajo el signo de los chantajes mutuos y bajo el auspicio de la CUP. Una vez más, ERC antepone su deriva nacionalista a las necesidades económicas y sociales. Mientras tanto, los responsables de la fuga de miles de empresas asumen la cartera de Economía. Con los rupturistas al mando, a los catalanes sólo nos espera más declive y provincialización».
«No podemos esperar nada bueno de un gobierno que nace bajo el signo de los chantajes mutuos y bajo el auspicio de la CUP. Una vez más, ERC antepone su deriva nacionalista a las necesidades económicas y sociales»
‘Por miedo a las urnas’
A su entender, los independentistas han llegado al acuerdo porque saben que han perdido a una opinión pública que los castigaría en las urnas. «Todas las encuestas recientes revelan el hartazgo de los catalanes frente al Procés y su distanciamiento ante la idea utópica de la independencia. La mayoría de catalanes queremos líderes políticos que apuesten por la concordia y por la fraternidad, en vez de por la división y la ruptura. Estamos ante un pacto de bunkerización en el poder, mientras la opinión pública reclama liderazgos sólidos para superar la crisis sanitaria, económica y social«.
«Todas las encuestas recientes revelan el hartazgo de los catalanes frente al Procés y su distanciamiento ante la idea utópica de la independencia».
Societat Civil Catalana acaba expresando en su texto el pleno compromiso con la defensa del orden constitucional y con la lucha contra todo aquél que vulnere el estado de derecho. «Trabajaremos con empeño para que en ningún rincón de Cataluña se oiga sólo la voz del independentismo».