El PROCICAT estudia dar luz verde a la apertura de bares y restaurantes catalanes para que puedan servir cenas. El veto sobre estos establecimientos se levantará el próximo 10 de mayo, un día después de que concluya el estado de alarma nacional. Este relajamiento de las medidas sobre la restauración, sin embargo, deberá combinarse con la pretensión del Govern de mantener o de fijar un toque de queda a partir del día 9.
En estos momentos, bares y restaurantes pueden abrir sus puertas hasta las 17.00 horas y servir desayunos y comidas. Y el Govern pretende mantener esta situación durante toda la semana que viene, a pesar de que el sector ya les ha solicitado en repetidas ocasiones que, dada la situación epidemiológica de descenso de los contagios y ocupación de UCIs, les permita ampliar el horario para poder trabajar.
Medida «inconstitucional»
El Gremio de la Restauración de Barcelona no solo se opone al mantenimiento del toque de queda una vez acabado el estado de alarma, sino que considera que, de aprobarse, se trataría de una medida «inconstitucional«. «La limitación permanente de derechos y libertades que tanto parece gustar al Govern es impropia de un sistema democrático», ha alertado esta patronal, «agarrarse al bloqueo económico es un error».