El nacionalismo se superará en Cataluña, como se superó en otros lugares. Lo específico del caso catalán es:
-Su gradualismo (los mismos partidos y sus votantes pasan de ser conservadores tradicionalistas a ser revolucionarios separatistas) y su fulgor (se inflama en 2006, llega a su cenit en 2014 y realiza su programa máximo en 2017).
-Que detrás tenga una administración regional cuyo origen es legal (mayoría de escaños independentistas y revolucionarios en el parlamento regional, aunque se hayan obtenido con una minoría de votos) pero cuyo comportamiento contraría la legalidad.
-La dejación del gobierno central de España en corregir las ilegalidades del gobierno regional catalán, su intento de substituir la legalidad española por su nueva legalidad separatista, y en impedir el golpe de Estado.
-El poder ejecutivo dejó que el golpe de Estado se produjera y luego fue el poder judicial el que debió cargar con las medidas de corrección, anulación, detención, juicio, sentencia y prisión.
-Quien debía y podía garantizar la legalidad y los derechos de los catalanes no lo hizo. Quien debe y puede, no lo hace. Quien deberá y podrá ¿no lo hará?
-Acaso antes del golpe de 2017, pero aún más claramente despúes del golpe, nadie contempla que con el ‘diálogo’ del gobierno de España con golpistas vaya a superarse la ‘cuestión catalana’, el ‘conflicto político’ o el desafío separatista. El contentamiento de los separatistas catalanes es imposible.
«Despúes del golpe, nadie contempla que con el ‘diálogo’ del gobierno de España con golpistas vaya a superarse la ‘cuestión catalana’, el ‘conflicto político’ o el desafío separatista. El contentamiento de los separatistas catalanes es imposible»
-Solo hay un modo de contentar a los separatistas catalanes: entregándoles la independencia a ellos. Esto es contrario a la Constitución y al Estatut. Además, hay una cuestión que acaso no es menor: mucho más de la la mitad de los catalanes y (para decirlo en términos constitucionales, legales y políticos) de los españoles no desea esto.
«Solo hay un modo de contentar a los separatistas catalanes: entregándoles la independencia a ellos»
Para superar el desafío del separatismo catalán hay dos vías:
-Que los votos constitucionalistas alcancen la mayoría de los escaños en el parlamento regional para formar un gobierno catalán constitucionalista.
-Que el gobierno de España inste al Senado y éste apruebe la aplicación del Artículo 155 de la Constitución Española y la Generalitat de Catalunya sea administrada por el gobierno de España.
El primer camino es muy difícil si no hay neutralidad de la administración separatista regional, si ésta usa la profusa propaganda habitual. La distribución del voto en el territorio y los condicionantes de un sistema electoral que prima las zonas rurales explican la dinámica del independentismo en las últimas dos décadas.
El segundo camino, que el gobierno de la nación administre la Generalitat, se hizo tras el golpe de Estado del otoño 2017. Se ejecutó ¡sin ningún daño colateral! Pero fue breve y excluyó ¡TV3 y la enseñanza! así como cambios significativos en la policía regional.
En las elecciones regionales del 21 diciembre 2017 los separatistas y revolucionarios repitieron una mayoría de escaños suficiente para formar otro gobierno separatista el 29 de mayo de 2018. La administración directa fue breve (desde las 20:26 horas del 27 de octubre de 2017 hasta las 12:41 horas del 2 de junio de 2018). Vale decir que si se prolongó cinco meses tras las elecciones autonómicas fue porque los partidos separatistas ganadores en escaños no se ponían de acuerdo en la formación de su gobierno. La aplicación del articulo 155 CE:
-Cumplió con su objetivo (cesar en el golpe de Estado, destituir al gobierno golpista de la Generalitat, administrar ésta directamente, y proceder a elecciones que dieran un nuevo gobierno).
-Mostró que no pasa nada malo (sic) cuando el Estado español toma las riendas de la situación política catalana.
-Pero en poco pudo contribuir a la recomposición de Cataluña, por su brevedad y porque el gobierno que le sucedió fue igualmente separatista (aunque, sin duda, evitó las ilegalidades flagrantes del anterior que obligaron al Estado español a intervenir).
La senda que llevará a la normalización del Estado de derecho en Cataluña se ha reconstruido en la Tabla 1.
Básicamente, la tarea consistirá en revertir la situación actual de severa confrontación, fruto de lustros de gobiernos separatistas catalanes. Para alcanzar el propósito de superar el separatismo son necesarios tres elementos:
- Voluntad política fuerte: de los votantes constitucionalistas, si se diera la vía 1; del gobierno de España, si se diera la vía 2.
- Relato sólido y atrayente. El separatismo se basa en la emoción: la sola razón no es suficiente para revertir la hegemonía del relato separatista.
- Tiempo largo. Cuanto los separatistas destruyeron y construyeron en tres décadas de encarnizada intervención no se revertirá a corto plazo. A corto, aplicación de todas las medidas relativas al Estado de derecho; a medio plazo, consolidación de la reconciliación, el entendimiento y la estabilidad; y a largo plazo, plena vigencia de la narrativa estilo Junts i millor!
La España constitucional se ha basado en cuatro pilares: i) descentralización amplia, con las Comunidades Autónomas; ii) democracia plena, con el Estado de derecho, representación y sujeción a la ley; iii) Estado del bienestar extenso, con justicia social y solidaridad interpersonal; y iv) economía productiva y competitiva, con seguridad jurídica y competencia en el mercado (ver la Figura 1).
El constitucionalismo tiene por delante una tarea titánica de reconstrucción de Cataluña y de estabilización de la política española. Tras 40 años, con el gobierno regional y los separatistas catalanes desconectando de España, y en muchos lugares y sentidos, efectivamente, desconectados de España, revertir la situación no será como un sprint sino como una maratón.
«El constitucionalismo tiene por delante una tarea titánica de reconstrucción de Cataluña y de estabilización de la política española»
El relato del constitucionalismo español a próposito del envite independentista a la democracia, al Estado de derecho y a la integridad de España tiene tres fuentes:
- El entendimiento y la concordia, la paz, la pluralidad, y el respeto.
- La razón y el interés, el lugar de la economía en la realidad y en el argumentario.
- El sentimiento y emoción con relación a España y lo español.
Cataluña está atenazada por las consecuencias del procés, que han preciptado una profunda decadencia. A su vez, en una hipotética secesión de Cataluña a la actual decadencia le sucedería el caos. Por todo ello, es tiempo cuanto antes se ataje la confrontación, antes se atajará la decadencia de Cataluña y se podrán rehacer mejor sus libertades, capacidades, progreso y bienestar.
«Cataluña está atenazada por las consecuencias del procés, que han preciptado una profunda decadencia»
Conclusión
- Hay dos vías para superar el independentismo catalán: a) un gobierno constitucionalista de la Generalitat; o b) la administración de la Generalitat por el gobierno de España.
- En cualquier caso, superar el separatismo catalán, revertir la destrucción que ha causado y la confrontación abierta entre catalanes, será una tarea extraordinaria que requiere voluntad política, relato de entendimiento en la democracia de España y tiempo largo.