El portavoz de Cs en el Parlament, Carlos Carrizosa, ha acusado a ERC y a JxCat de mantener bloqueada Cataluña mientras deciden si pactan o no el futuro Govern. Lo ha hecho durante la segunda sesión de la investidura de nuevo fallida del republicano Pere Aragonés. Carrizosa ha asegurado que ambas formaciones pretenden activar dos gobiernos, «uno real y otro parelelo» con el único objetivo de «satisfacer los egos y los orgullos heridos por las guerras partidistas».
«Han llegado tan lejos en su desprecio por la autonomía», ha dicho Carrizosa, «que se han olvidado de darle a la Presidencia de la Generalitat la dignidad que merece». El líder de Cs le ha preguntado a Aragonés si le merece la pena ser un presidente «sometido al perpetuo chantaje de su propio partido, de JxCat, de la CUP y de las tóxicas relaciones» que mantienen entre ellos, según ha recogido Europa Press.
Humillación sistemática
Desde las filas del PP, el diputado Alejandro Fernández ha avisado irónicamente a Pere Aragonés de que «desde Waterloo han decidido humillarle». Y ha añadido: «Una cosa es la humildad y otra es la humillación sistemática desde un ente (en referencia al Consell per la República) que, además, no tiene legitimidad».
«Todo lo que envuelve Waterloo, a pesar de tener ese tono ya excéntrico y fantasmagórico y en algunos momentos ‘friki’, sigue teniendo una influencia negativa y una capacidad de condicionar y desprestigiar gravísimamente las instituciones catalanas. Ya va siendo hora de romper ese cordón umbilical», ha zanjado Fernández en la segunda vuelta del pleno de investidura.
Fernández, además, ha criticado duramente al PSC y a su líder, Salvador Illa, al que ha acusado de «mentir en plena campaña» cuando dijo que no pactaría con los republicanos. Algo que ha desmentido él mismo este martes en su intervención.